Mercedes todavía necesita un tiempo para asimilar la marcha de Lewis Hamilton. El fichaje del británico por Ferrari ha dejado secuelas en la escudería germana. Y es que, pese a que tanto su sustituto, el jovencísimo Kimi Antonelli, como George Russell consiguieron la cuarta y tercera plaza, respectivamente, hay algunos que no han conseguido olvidar al heptacampeón del mundo.
Y uno de ellos es el propio director Toto Wolff, quien reconoció al finalizar el primer Gran Premio de la temporada que su mente se dejó llevar por los sentimientos durante todo el certamen australiano. Y es que seis títulos celebrados en Brackley dan para que cuando vistas otros colores estén todavía pendiente de tus éxitos: "Cuando miraba las pantallas a veces, era como si tuviéramos tres pilotos. Porque miraba a RUS, miraba a ANT, y miraba a HAM, y te das cuenta de que HAM está con Ferrari y ya no estaba con nosotros. Así que todavía se siente como si perteneciera al equipo, fue mucho tiempo, es lógico, no se puede decir que se ha ido y ya no te importa, nos importa mucho cómo lo está haciendo, pero en la pista es la competencia y tenemos que vencerle".
Finalmente, el piloto británico tuvo un comienzo decepcionante con su nuevo equipo y sólo pudo sacar un punto al acabar décimo. Pese a ello Toto Wolff se muestra optimista: "Creo que es un primer fin de semana sólido, pero mirándolo siempre desde el lado del vaso medio vacío, hay que decir que el ritmo del McLaren fue muy fuerte".
A este primer resultado del inglés ya se le están buscando explicaciones, puesto que las expectativas apuntaban al podio desde que se confirmó su marcha de Mercedes: "Algo que tenemos que entender, la forma en que son capaces de gestionar los neumáticos y extraer rendimiento, tenemos que mejorar. Si queremos luchar, por méritos, por victorias de carrera y por un campeonato, entonces hay algo que tenemos que encontrar".
Cuando se bajó de su monoplaza en Albert Park, Lewis Hamilton se mostró sorprendido: "Ha sido una de las carreras más complicadas que recuerdo. Fue mucho peor de lo que pensaba. El coche era muy, muy difícil de conducir hoy. Doy las gracias de haber impedido que acabase contra el muro porque se quería ir hacia él la mayoría del tiempo".
Eso sí, el inglés tuvo claro quiénes fueron los responsable de tan flojo comienzo: "Decían que iba a llover solo una vuelta, que iba a ser una lluvia muy corta, así que mantuve la calma en pista y conseguí el liderato cuando todos entraron (a 'boxes'). Aguanté tanto como pude (...). La información no fue la adecuada, así que creo que perdimos la oportunidad. Ha sido una pena".