Francisco Salas3 min lecturaEl Mundial de Fórmula 1 vive este fin de semana su penúltimo gran premio de la temporada 2024 en Qatar, más concretamente en el mítico circuito de Losail, una espectacular carrera nocturna marcada por el calor y las durísimas condiciones que llevan al límite físico a todos los pilotos. En 2023 ya vimos a algunos teniendo que pedir ayuda incluso para salir del coche, muy mermados por llevar el cuerpo al extremo y en general, en un nivel muy alto de sufrimiento. Sin embargo, no parece que eso afectara al más veterano, Fernando Alonso. El asturiano acabó muy 'fresco', pese a no haber obtenido un gran resultado, algo que muy probablemente se va a repetir el domingo.
Primero hay que poner contexto a la situación, ya que Aston Martin es ahora mismo uno de los equipos que llega en peor situación a este tramo final de la temporada, habiendo pasado de ser uno de los mejores coches con diferencia, a que pelear por los puntos sea una quimera. Las exhibiciones de Alonso les han salvado muchas veces, pero cada vez iban a menos y ni con eso valía, ya que están a la altura de los monoplazas más lentos. Y en Qatar no parece que vaya a mejorar.
Y es que el equipo de Silverstone ha decidido no traer absolutamente ninguna mejora a Qatar, lo que pone en una situación más que complicada a Alonso, que les va a obligar a conformarse por acabar y esperar que haya problemas, ya que sería una sorpresa que de repente empezaran a ir mejor, teniendo en cuenta las condiciones del circuito, que sobre el papel no favorecen nada a los coches verdes.
Si algo puede ayudar a Fernando Alonso o Lance Stroll es que el trazado haga de las suyas, ya que al estar en medio del desierto, hay mucha tierra, y a la mínima que haga viento se ensucia mucho la pista, lo que provoca un desgaste extremo de los neumáticos. Y en ese descontrol, con coches entrando mucho a boxes y un gran baile de estrategias, es donde se pueden buscar la forma de que funcione lo mejor posible lo que planteen y consigan darle la vuelta a una circunstancia que a priori se ve complicada.
Eso sí, este 'abandono' temprano de 2024 significa que llevan ya tiempo centrados en el coche del año que viene, por lo que a partir de 2025 y sobre todo de cara a 2026 podemos esperar un Aston Martin muy renovado que sea capaz de volver a donde estaba hace no mucho.