Los Juegos Olímpicos de París dejan victorias o derrotas inesperadas, éxitos celebrados por todo lo alto o fracasos que se traducen en lágrimas. Pero también dejan hechos cuanto menos curiosos. El último, el protagonizado por el olímpico australiano Thomas Craig, miembro del equipo de hockey hierba de la selección de Australia, que ha sido arrestado en París el martes por la noche al intentar comprar cocaína. El de 28 años fue detenido por la policía francesa durante un presunto intento de compra de la droga, un incidente que ha generado una considerable atención mediática.
El Comité Olímpico Australiano (AOC), institución encargada de regir la participación de Australia en los juegos olímpicos y las distintas competiciones dentro y fuera del continente oceánico, aseguró que "uno de sus jugadores de hockey estaba detenido, pero enfatizó que no se habían presentado cargos contra Craig en el momento de su declaración. El AOC está realizando investigaciones y brindando apoyo al atleta, quien se encuentra bajo custodia", apuntan.
La detención de Craig, que participó el domingo en la derrota de su Australia ante Países Bajos en cuartos de final del torneo masculino de hockey de los Juegos Olímpicos de París, ocurrió en el distrito IX de París, donde las autoridades policiales presenciaron la transacción de drogas fuera de un edificio. También fue detenido el supuesto vendedor de la cocaína. La Fiscalía de París informó que "la Brigada de Estupefacientes está a cargo de la investigación debido a las cantidades de narcóticos incautadas al vendedor".
No ha sido la única sanción curiosa que ha transcendido en los Juegos Olímpicos de París, ya que como se pudo conocer al comienzo de los mismos, el equipo femenino de fútbol de Canadá perdió seis puntos y la entrenadora Bev Priestman fue suspendida por un año después de que se utilizara un dron para espiar las sesiones de entrenamiento de un equipo rival, Nueva Zelanda. El analista Joseph Lombardi recibió la misma inhabilitación por parte de la FIFA, y la entrenadora asistente, Jasmine Mander, también está entre las personas suspendidas, después de haber sido ya sancionada por la propia Federación Canadiense de Fútbol (Canada Soccer).
"Los técnicos han sido declarados responsables de conducta ofensiva y de violación de los principios del juego limpio", comunicó la FIFA en una nota de prensa, confirmando una multa de 200.000 francos suizos (alrededor de 210.000 euros).