El parón de selecciones le ha venido que ni pintado al Villarreal CF. La entidad amarilla ha sufrido varios varapalos en cuanto a resultados –el último 1-2 en La Cerámica ante la UD Las Palmas– y sin duda necesitaba un periodo de reflexión que ahora ha llegado con estas dos semanas sin competición oficial.
De cara a lo que viene por delante, el presidente del equipo, Fernando Roig, ha mandado un mensaje de unión que ahora es secundado por el capital del mismo, Raúl Albiol. Sin embargo, el veterano central va más allá y no duda a la hora de poner nombre al gran problema del equipo.
"Es un inicio difícil. Es la verdad. Necesitamos trabajar y tener paciencia. Eso es lo que nos va a llevar a ganar partidos. Es el único camino para poder acercarnos a la victoria. Tenemos una semana más para seguir adaptándonos a los conceptos del míster y preparar el partido ante el Alavés. No todo es malo. Hemos hecho cosas buenas. Debemos acogernos a eso y corregir los errores. Hay que mantener la cabeza en los momentos importantes", comenta antes de señalar al plano psicológico como ese detalle que les está frenando y que puede complicarle enormemente la deseada reacción.
"Me preocupa más el plano mental. Nos hemos ido del partido en acciones de expulsiones o nos hemos venido abajo al encajar un gol. Lo sabemos y queremos que no vuelva a pasar. Por el bien del equipo, hemos de conseguirlo. A partir de ahora, no queremos que nos vuelva a ocurrir. Si pasa, que sea por lances del fútbol. Nunca por agresiones", indica tras las expulsiones sufridas en estas primeras jornadas.
Cuestionado por el ambiente que se vivió en el último parido de LaLiga EA Sports, en el cual los aficionados no dudaron a la hora de mostrar su descontento con los jugadores, el zaguero reitera que necesitan su apoyo para salir de la actual situación.
"El club es lo más importante y la afición también. Son los dos pilares fundamentales. Los necesitamos de nuestro lado, aunque entendemos que estén decepcionados con el inicio. Les necesitamos durante los partidos, luego de los partidos son soberanos para aplaudir o pitar, según vean", explica.
El capitán tampoco ha tenido problemas en hablar sobre el adiós de Quique Setién y la llegada de Pacheta al banquillo. "El club es el que decide quién tiene que dirigir al Villarreal. He respetado a todos los entrenadores siempre. Ningún compañero ha dejado de respetar a Quique o Pacheta. Se les respeta siempre", comenta para justo después centrarse en el trabajo con el nuevo técnico
"Intentamos coger rápido sus conceptos, hacerlo lo mejor posible con su idea e intentar ganar partidos. Cuando se gana, ganamos todos. Cuando se pierde, también lo hacemos todos. El objetivo de todos es el mismo: ganar y conseguir los objetivos. Es lo mejor para todos. Si le va bien al equipo, nos va ir bien a todos", sentencia.