Ha llovido bastante desde que Koffi Ndri Romaric abandonó el Sevilla FC. Pero en Nervión aún tuercen el gesto al recordar a un futbolista del que se esperaba mucho, si bien desde el primer día quedó señalado por el pobre estado físico que lució en su presentación oficial. Calificativos como "gordo" o "lento" le acompañaron en su andadura en Nervión, además de los rumores sobre una vida extradeportiva nada recomendable que él se encargó de desmentir. "Se dicen muchas tonterías y cosas que no son verdad", afirmó en su momento acerca de sus presuntas salidas nocturnas, entre ellas una junto a Zokora antes de un partido ante el Barça en la Ciudad Condal que acarreó la consiguiente multa por parte del club.
Pero junto a todo ello, el ex internacional costamarfileño también demostró poseer una gran pierna izquierda. Por momentos, sí llegó a ofrecer un buen rendimiento, disputando finalmente 121 encuentros a lo largo de tres temporadas (2008 a 2011), en los que firmó 8 goles y 16 asistencias y levantó la Copa del Rey. Por ello, Monchi no dudó en afirmar en su día que seguirían viniendo más 'Romarics', aunque fue su mano derecha y actual director deportivo nervionense, Víctor Orta, quien más se esforzó para convencer al Le Mans en unas duras negociaciones que acabaron con el desembolso de 8,5 millones de euros.
"Romaric, más allá de su peso o no peso, de su forma de ser o de su vida y tal, era el perfil de jugador que ficha el Sevilla. Uno que destaca en un equipo pequeño, en una liga más o menos competitiva y viene aquí. Así llegaron Kanouté, Escudé, Poulsen... Nuestro perfil de fichaje nunca es una estrella. ¿Por qué dije más 'Romarics'? Porque siempre iba a traer ese formato. Siempre alguien que viene de atrás y con hambre", afirmó el hoy responsable de la planificación deportiva del Aston Villa.
En el día a día de los entrenamientos, por su parte, fue Manolo Jiménez quien tuvo que lidiar con el peculiar centrocampista africano. Ahora, viéndolo todo con la perspectiva que otorga el tiempo, el técnico arahalense lamenta que su pupilo no pudiera demostrar toda la calidad que atesoraba y admite que fue su falta de profesionalidad la que le llevó a esa situación, pese a desvelar el curioso elogio recibido por el mediocentro en aquella época. "Es una pena. Luis Aragonés, que era el seleccionador de España cuando él estaba en el Sevilla, le dijo una frase a José María del Nido: 'De los 22, el mejor es el ‘negro’ que lleva el número 22’. Y yo estoy de acuerdo, técnicamente era el mejor, lo que pasa es que no se cuidaba. Era un caso perdido", ha asegurado en el programa 'El Cubo' con Roberto Arrocha, en los medios oficiales del club.
Tras su paso por el Sánchez-Pizjuán, Romaric estuvo una campaña cedido en el Espanyol y tras ella se marchó libre para tratar de relanzar su carrera junto al técnico que él mismo calificó como su "padre deportivo". "Después del Sevilla me lo llevé al Zaragoza, pero hay futbolistas que no puede ser. Tácticamente era muy listo, pero su cuerpo no le daba. Técnicamente era superior, para mí de los mejores futbolistas que yo he visto, a nivel de competición no, por supuesto", recalcó el ex entrenador nervionense, que no ha perdido el contacto con el marfileño.
Tras pasar también por el Bastia francés, el Omonia Nicosia chipriota y el NorthEast UNinetd de la India, colgó las botas en 2017 y regresó a España para obtener el carnet de entrenador, dirigiendo en los últimos años a equipos de su país como el Zoman FC, el AFAD Djékanou y el SOL FC d'Abobo, hasta el pasado verano. Atrás dejó una etapa turbia y ahora nada tiene que ver su vida con la de antes. "Ha estado como entrenador de los escalafones inferiores de Mali. No hace mucho hablé con él y está super formal. Responsable al cien por cien, cero alcohol y se cuida al máximo", ha aclarado el propio Jiménez, al que le habría gustado que ese sucediera cuando lo tenía a sus órdenes.