Quique Sánchez Flores no se mordió la lengua en la rueda de prensa previa al partido contra el Rayo, consciente de lo mucho que hay en juego en Vallecas, y se refirió con crudeza a la situación de varios futbolistas de la plantilla que, según su criterio, no tienen cabida en su equipo por la ausencia de compromiso en una situación extrema.
De ese modo, el técnico sevillista sentenció tanto a Rafa Mir como Adnan Januzaj, que, finalmente, se quedaron en Nervión tras el cierre del mercado y a los que no ve con la actitud suficiente para ayudar al equipo.
"Los chicos son profesionales, pero cada uno entiende la exigencia de una manera diferente y yo ahora mismo tengo la exigencia por encima del listón que ellos tienen marcados", aseguró Quique, que fue elevando el tono: "Después de haber probado, de haber ido a ellos en la necesidad más absoluta, llega el momento en el que ya no hay tiempo para bajar el listón. La exigencia es la que es y quien no la alcanza no puede jugar minutos".
"No vale con ser un buen profesional en lo futbolístico, hay que tener el compromiso necesario para defender la camiseta del Sevilla", señaló Quique, que, al ser cuestionado si ha hablado con Mir, fue de nuevo muy claro: "Yo soy un entrenador, no un animador. Delante de los fans hay que tener un grado de exigencia, se lo debemos, y no voy a tener conversaciones con futbolistas para decirle cuánto se tienen que esforzar. Eso debe salir solo".
También le dio un toque de atención a Hannibal Mejbri, que, desde su llegada, apenas si ha disfrutado de protagonismo a sus órdenes. "He tratado de explicarle en la situación en la que estamos, que es parecida al club de donde vienen (Manchester United), donde el sacrificio está por encima de las virtudes talentosas. Solo con talento no vamos a ninguna parte, necesitamos organización, deseo, ganas de jugar", indicó el míster, que añadió: "Las condiciones las tiene, pero tiene que entender todo esto".
Además, también fueron muy significativas sus revelaciones sobre la salida de Rakitic, asegurando que mantuvieron una conversación muy sincera en la que quedó clara la situación. "A Rakitic lo respeto muchísimo por su carrera. Mantuvimos una charla muy honesta antes de irse. Él me preguntó si no contaba con él y le dije que sí, pero también le pedí algo para su continuidad y me dijo, muy honestamente, que no me podía dar lo que le pedía".
En cuanto al mercado de fichajes, aseguró que "ha habido movimientos y que han llegado chicos jóvenes con energía y con ganas de hacerlo bien". "Ahora hay que ver si esas energías coinciden con lo que necesitamos. Queremos gente que no tenga una mochila con problemas. Estoy seguro que de la dirección deportiva y el club lo ha dado todo y ha hecho un gran esfuerzo para reforzar el equipo", señaló.