En esta mismo portal web se hacía referencia ayer de la extrema volatilidad del mercado de fichajes y, más aún, de la ventana invernal, donde siempre suele haber más necesidades que recursos, contexto que en el Sevilla FC actual está elevado a la misma potencia. El lector incluso podrá enfadarse y recelar de las cambiantes informaciones, pero lo que han estado transmitiendo fuentes oficiales en los últimos días es que Lucien Agoumé estaba a punto de cerrar su llegada al club de Nervión, cedido por el FC Inter, y que incluso se le esperaba en la capital andaluza en los primeros días de 2024 para pasar las pruebas médicas; que con todo encarrilado apareció el Olympique de Marsella ofreciendo mejores condiciones económicas a los italianos y haciendo dudar al jugador; que su agente metía prisas a Víctor Orta, que el mediocentro franco-camerunés había pedido un poco más de tiempo para tomar una decisión y que, pese a que medios de Francia e Italia daban casi por hecha su llegada al OM, en las oficinas del Sánchez-Pizjuán mantenían el optimismo. Anoche, varias fuentes hablaban de acuerdo cerrado con los galos; pero esta mañana amanece con un enésimo giro de guion: rotas las negociaciones Agoumé-Marsella, vía libre para el Sevilla FC y un nuevo actor para el serial, pues Boubakary Soumaré, al margen de sus motivos familiares para no jugar anoche, se acerca al SSC Nápoles. No pongan ustedes la mano en el fuego a que sea el último volantazo argumental.
La noticia llega a cargo del siempre activo Fabrizio Romano, que confirma que a última hora de la noche había acuerdo pero ahora los galos se habrían echado atrás después de ver las enormes dudas que seguía albergando Agoumé. El OM tenía a su favor el gancho de jugar en Europa y la baza de haber ayudado al Inter a poder exigir más dado el aumento de la competencia; pero desde el Sevilla FC siempre han transmitido que tenían convencido al jugador. "Más cerca que el otro día", decía Del Nido Carrasco antes del partido contra el Athletic Club al ser preguntado por sus esperanzadoras declaraciones en su presentación como presidente y la intromisión de los franceses. Tras el 'deuce' y la ventaja para el Marsella, los andaluces vuelven a recuperar la iniciativa de la operación.
Lo mismo transmitían los dirigentes blanquirrojos en privado, insistiendo en que creían haber convencido a Agoumé, que es consciente de que su papel en el equipo del Velodrome iría perdiendo protagonismo cuando vuelvan de la Copa de África la pareja titular de mediocentros, Ounahi y Hamit, además de Pape Gueye; mientras que en el equipo de Quique Sánchez Flores tiene muchas opciones de ser titularísimo. Más aún cuando, después de la despedida de Fernando Reges, se teme por una lesión de Nemanja Gudelj y además la salida de Soumaré rumbo a Nápoles sigue tomando forma. La suma de estos tres hechos, el último pendiente de confirmación y que exige moverse con tacto ante la difícil situación familiar que vive el jugador cedido por el Leicester City, podría explicar por qué el club ha decidido seguir aguantando la ficha libre que dejó el 'Pulpo' brasileño a pesar de que tiene a Isaac Romero entrenando con el primer equipo a la espera de licencia y casi sin competencia en la delantera sevillista.
La situación de Boubakary Soumaré en el Sevilla FC da para una conversación de las largas. Llegó el último día del mercado estival de fichajes llamado a convertirse en un futbolista muy importante e incluso con vistas a quedarse tras su préstamo, opción que ganó fuerza cuando, por fin, Diego Alonso le empezó a dar minutos. Con Mendilibar no jugó casi nada, pues había llegado después de un mes del inicio de la competición, no entendía el español y el vasco decía que no podía comunicarse con él. El charrúa sí lo consiguió, pero cuando sumaba tres partidos seguidos y era de lo mejorcito de un equipo a la deriva, se lesionó el tobillo tras un resbalón en Londres y ya no ha vuelto a ser el mismo.
Las repetitivas noticias de la ofensiva del Nápoles, que lleva desde mediados de diciembre negociando con el Leicester la manera de cancelar su cesión al Sevilla FC para ficharle, invitaban a pensar que su inesperada ausencia de última hora en la lista de convocados ante el Athletic Club tenía que ver con una inminente salida rumbo al estadio Diego Armando Maradona. Quique Sánchez Flores se apresuraba a remarcar la versión institucional y pedía respeto, al tratarse de "un caso familiar y con pequeños de por medio". Sin embargo, las palabras del técnico no han impedido que hoy los medios italianos apunten a que hay negociaciones avanzadas para su llegada al club celeste.