Benfica 0-1 Sevilla: Sonríe con lo puesto y un filial que siempre da la cara

Sampaoli está viendo los primeros frutos de todo lo que ha sembrado desde que llegó, seguramente con mimbres que no habría elegido en verano y que difícilmente reverdecerán con otros nombres en enero. Además, entre Qatar 2022 y las lesiones de los que se quedaron (Marcao, Lamela, Tecatito Corona, ahora Suso...), llegará a Torremolinos y Vigo con lo puesto, teniendo en cuenta que Nianzou y Rakitic no podrán actuar en Balaídos por sanción, que Isco quiere irse desde su encontronazo con Monchi, que Januzaj no está ni se le espera, que al Papu, Acuña y Delaney se les quiere buscar acomodo fuera, como a un Dolberg camino casi del Hoffenheim... Demasiados contratiempos que, sin embargo, no están despistando al Sevilla FC, que compitió contra el Mónaco y que ganó este domingo al Benfica (0-1), que no había perdido un solo partido, oficial o amistoso, desde el pasado verano.

De inicio, el de Casilda repitió el esquema del miércoles ante los monegascos, con una defensa de cinco que, en realidad, tenía de comodín a Fernando, ideal por sus cualidades para incrustarse entre los centrales para mejorar la salida y pertrecharse mejor, amén de romper líneas y generar superioridad por dentro a la hora de dibujar las transiciones. El Mundial ha querido que, por la izquierda, Rekik sea el único capaz de ejercer de carrilero, obviamente sin la capacidad de ir y venir de Navas en el costado opuesto, al tiempo que el ex seleccionador chileno y argentino prefiere que Rafa Mir percuta desde las bandas y otro (Suso, hasta que se retiró con molestias, y Carlos Álvarez, después) ejerza de 'falso 9', en principio para confundir un poco a los centrales rivales.

El plan apenas funcionó en el primer tiempo, cuando la presión tan alta como agresiva de las 'Águilas' complicó continuamente los intentos nervionenses de sacarla jugada desde atrás. Solamente la impericia de los teóricos anfitriones y las reacciones a tiempo de Dmitrovic o Rekik, por ejemplo, impidieron un marcador desfavorable al descanso para los este domingo rojinegros, que se fueron sacando poco a poco de encima el agobio para terminar esta fase inicial a buen nivel. De hecho, Gudelj pudo inaugurar el marcador con un trallazo lejanísimo marca de la casa, mientras que Rafa Mir no logro conectar, muy forzado, el servicio de Óliver Torres y Jordán, en el alargue, cruzó demasiado con todo a favor, por lo que se puede decir que hubo equilibrio numérico en lo que a oportunidades claras se refiere.

En la reanudación, bastante mejor los de Sampaoli, en parte porque su oponente cambió el once entero en el intermedio y lo pagó. Rakitic, cumplido el cuarto de hora, convirtió el único tanto del encuentro, tras una buena acción en ataque de Rekik, si bien el Sevilla, como frente a los del Principado, dio la cara cuando entraron los chavales en masa. Se calentó entonces la contienda y tuvo el empate por dos veces Rodrigo Pinho, pero apareció Dmitrovic para amarrar una victoria de gran valor anímico, aparte del deportivo. Queda lo más duro, cruzando, además, los dedos para que Monchi atine esta vez.

Así lo vivimos minuto a minuto

FICHA TÉCNICA.-

SL Benfica: Helton (Samuel Soares 46'); André Almeida (Gilberto 46'), Joao Víctor (Morato 46'), Brooks (Veríssimo 46'), Grimaldo (Mihailo Ristic 46'); Florentino (Aursnes 46'), Chiquinho (Paulo Bernardo 46'); Diogo Gonçalves (Neres 46') (Joao Neves 76'), Rafa Silva (Gil Dias 46'), Draxler (Henrique Araújo 46'); y Musa (Rodrigo Pinho 46').

Sevilla FC: Dmitrovic; Jesús Navas (Lulo 71'), Nianzou (Kike Salas 71'), Gudelj (José Ángel Carmona 46'), Rekik (Hormigo 71'); Fernando (Pedro Ortiz 71'), Rakitic (Manu Bueno 71'), Joan Jordán (Johansson 71'); Oliver Torres (Isaac Romero 71'), Suso (Carlos Álvarez 41'); y Rafa Mir (Nacho Quintana 71').

Árbitro: Miguel Nogueira (portugués). Roja directa al nervionense Rafa Mir, ya en el banquillo tras ser sustituido (83'). Amarillas al local Veríssimo y el visitante Isaac Romero.

Gol: 0-1 (61') Rakitic.

Incidencias: Encuentro amistoso disputado en el Estádio Algarve de Faro (Portugal) ante 3.791 espectadores, con presencia de un nutrido grupo de aficionados sevillistas.