Sara Portillo Maya5 min lecturaEl 'caso Rubiales' ha propiciado que la FIFA suspenda o inhabilite a Luis Rubiales para cualquier actividad relacionada con el fútbol, tanto a nivel nacional como internacional por tres años y esa decisión del organismo hace que el expresidente de la Real Federación Española de Fútbol reciba una sentencia definitiva dentro de las fronteras españolas, ya no podrá presentarse en el futuro a cualquier proceso electoral dentro de la RFEF. No paran de sucederse las malas noticias para el que fuera presidente de la REFE y eso que todavía hay un expediente abierto del TAD, así como la resolución vía penal en el denominado comúnmente 'caso Rubiales' (el juicio por la supuesta agresión sexual y coacciones a la futbolista Jenni Hermoso).
La FIFA, máximo organismo del fútbol mundial, tomó esta determinación a consecuencia del expediente abierto a Luis Rubiales el pasado 26 de agosto. Y esta hace que Luis Rubiales quede inhabilitado de por vida tanto para presidir la RFEF como cualquier otra federación. Para comprenderlo hay que atender al borrador de la nueva ley en procesos electorales que anunció el Consejo Superior de Deportes el pasado 15 de septiembre (está en fase de tramitación). El pasado 11 de octubre fue cuando el Ministerio de Cultura y Deporte sacó a la luz el borrador de la nueva orden ministerial que tiene como fin regular los procesos electorales de todas las federaciones. En ella, hay cambios importantes que están destinados a una mayor democratización, buen gobierno, igualdad e inclusión.
El artículo 17 del borrador de la mencionada legislación está relacionado con la "elección de la persona que ostente la presidencia" y en el mismo aparece de forma clara, en el punto número dos, que si alguien quiere ostentar el cargo mencionado no podrá si se da el siguiente supuesto: "Incapacidad, inelegibilidad o incompatibilidad, de acuerdo con lo previsto en la normativa de la correspondiente Federación Deportiva Española". Otro requisito es "no estar inhabilitado para ocupar cargos directivos o de representación en el ámbito deportivo por resolución firme en vía administrativa dictada por el órgano disciplinario competente, ni estar inhabilitado para el desempeño de cargo público o de representación por sentencia judicial firme, ni estar inhabilitado en el ámbito deportivo por resolución definitiva de un Tribunal Deportivo, una federación nacional o internacional".
Esa terminología se traduce en que un presidente que haya sido inhabilitado no va a poder volver a serlo en el futuro. Y todo, aunque cumpla la sanción que el organismo le haya decidido imponer. La decisión de la comisión disciplinaria de la FIFA ha puesto de lleno en esa tesitura al exmandatario de la Real Federación Española de Fútbol. Luis Rubiales ya no está habilitado durante tres años en cualquier acto de fútbol, ahí entra el proceso electoral de la propia RFEF que está previsto para el primer semestre del año 2024. En un ejercicio de cálculo rápido, se obtiene como resultado que la inhabilitación de la FIFA al exmandatario culminaría para el 30 de octubre del 2026, pero si se atiende a la nueva regla en la norma de España, esta le va a impedir participar en cualquier actividad federativa que se dé dentro de España.
Son varios los trámites por los que debe pasar el borrador de la nueva normativa. El primero de ellos es pasar por la audiencia pública, donde recibirá las posibles alegaciones que presenten todas las partes que quieran realizar algún tipo de aportación a incorporar (se extiende hasta el 3 de noviembre). Luego, el texto pasa al ministerio como paso previo a su entrada en vigor.
Desde el momento en que entre en vigor, cada federación lo tiene que adecuar a su reglamento electoral (que tiene que estar aprobado por la Comisión Directiva del CSD para que se pueda proceder a la convocatoria de elecciones). En el primer trimestre del próximo año 2024, todas las federaciones deportivas pueden iniciar sus procesos electorales bajo la nueva legislación. Una nueva orden ministerial que modifica de forma importante algunos aspectos, como el de democratizar los mencionados procesos.