Álex Martín4 min lecturaMalísimas noticias para el Real Valladolid. El conjunto pucelano, que se encontraba contra las cuerdas ante el Espanyol, se ha topado con una desgracia. Raúl Moro, una de sus grandes estrellas, se ha tenido que retirar antes de tiempo del terreno de juego en Cornellá, haciendo saltar las alarmas. Cuando más cotizado estaba, el futbolista, que se ha situado en el punto de mira de clubes como el Ajax, ha tenido que marcharse en camilla, lo que, probablemente, puede suponer un frenazo a su carrera deportiva.
En los primeros minutos de la segunda mitad, en una conducción, Raúl Moro chocó con Pol Lozano, cayendo mal al terreno de juego. Desde el primer momento, hizo saltar las alarmas, ya que se pidió rápidamente la entrada de las asistencias al verde. De hecho, tuvo que retirarse en camilla, lo que hace temer lo peor sobre alguien que se encontraba en uno de los mejores momentos de su carrera deportiva.
Tal y como se ha podido ver en las imágenes, el futbolista del Valladolid se estaba quejando de la clavícula, por lo que podría ser la zona afectada. Hay que esperar el parte médico del conjunto que suele disputar sus encuentros en el José Zorrilla, pero lo cierto es que tiene muy mala pinta el estado físico de un futbolista cuyo nombre era uno de los más cotizados en el presente mercado de fichajes. No en vano, el Ajax, hasta hace unos días, se encontraba muy cerca de cerrar un acuerdo con todas las partes para hacerse con sus servicios.
Precisamente, en las últimas horas, el conjunto neerlandés fue protagonista, ya que se apuntó a que se había retirado de las negociaciones. Asimismo, se informó de que el Celtic, uno de los clásicos del fútbol inglés, había entrado en escena para tratar de firmar a un Raúl Moro cuyo futuro es, en estos momentos, una auténtica incógnita. A la espera de conocer su diagnóstico exacto, todo apunta a que puede quedarse fuera de los terrenos de juego una larga temporada, lo que puede paralizar cualquier tipo de operación, lo que supondrá un duro mazazo para el catalán, cuyo rendimiento estaba siendo una de las pocas alegrías de las que podía presumir un Valladolid cuyo futuro es delicado.
Curiosamente, en la jugada posterior, un lanzamiento de falta, llegó el gol del empate para el Real Valladolid. Javi Sánchez, de forma magistral, fue capaz de devolver la igualada al encuentro ante el RCD Espanyol, uno clave para los dos conjuntos, ya que ganar suponía dar un paso de gigante para escapar de la zona de descenso en la que se habían asentado en las últimas semanas tanto pericos como pucelanos.