La Real Sociedad vuelve al trabajo y prepara el duelo del fin de semana ante el Girona en Montilivi. Imanol Alguacil recupera a los internacionales que han viajado con sus combinados nacionales en este parón de selecciones y baraja las posibilidades de cara al partido de la jornada 10 de LaLiga. La principal duda del técnico donostiarra reside en el lateral derecho. La opción de Odriozola para el carril diestro vuelve a aparecer en el horizonte después de que el defensor perdiese su primera oportunidad tras una acción en el entrenamiento con Brais Méndez que dejó lesionado al lateral. Aramburu ha puesto contra las cuerdas a la Real Sociedad tras su participación con Venezuela e Imanol se decanta por probar al que fuese canterano 'txuri-urdin' para dar descanso al venezolano.
Aunque los pocos minutos que ha jugado Odriozola esta temporada en la Real Sociedad no han terminado de convencer a Imanol, el donostiarra está dispuesto a confiar de nuevo en el defensor que apenas suma 134 minutos en esta campaña. El lateral jugó la última media hora ante el Mallorca, fue titular ante el Niza en su mejor actuación de lo que llevamos de curso y también lo fue frente al Anderlecht, pero fue sustituido al descanso tras los múltiples errores cometidos. Ahora, tras el parón de selecciones y el cansancio de Aramburu, surge una nueva opción para Odriozola que gana enteros frente al venezolano para el duelo ante el Girona. El defensor estará ante otra gran oportunidad para dar un golpe sobre la mesa y demostrarle a Imanol su capacidad para hacerse con la titularidad en el lateral derecho y desplazar a un Aramburu que está en un gran estado de forma.
La situación de Venezuela y el compromiso de Aramburu ponen en un aprieto a la Real Sociedad que ha encontrado en el defensor la mejor opción para el lateral derecho del equipo de Imanol Alguacil. Odriozola tendrá que pelear el puesto con Aramburu se ha reivindicado en la Real Sociedad. El lateral venezolano ha asumido galones en el conjunto de Imanol Alguacil tras la baja de Hamari Taroré y, hasta la fecha, ha cumplido con creces a las exigencias del técnico donostiarra. El cansancio acumulado del venezolano juega a favor de Odriozola que llega muy descansado y con las pilas cargadas al duelo ante el Girona.