Álex Martín4 min lecturaMikel Oyarzabal es uno de los mitos modernos de la Real Sociedad. El atacante, quien ha tenido altos y bajos en el primer equipo del conjunto donostiarra, se ha consolidado bajo las órdenes de Imanol Alguacil, llegando a ser el capitán de uno de los clásicos de nuestro fútbol. Con el paso del tiempo, ha vivido diferentes momentos, tanto buenos como malos. Uno de los mejores, sin duda, fue la conquista de la Copa del Rey ante el Athletic en 2021. Ahora, tras el final de la campaña, ha querido repasar para los medios de la entidad del Reale Arena algunos de los puntos clave del curso que acaba de finalizar en la escuadra de San Sebastián, de la que es uno de sus grandes referentes.
El primer momento que resalta el jugador de la escuadra donostiarra es el primer encuentro que disputaron en casa, ante el Inter, en la máxima competición continental. "El primer partido de la Champions, en casa, con nuestra gente. Hicimos un partido muy, muy bueno, fue una pena como terminó, pero estuvimos orgullosos del encuentro que hicimos, que fue muy bueno y con el que la afición disfrutó mucho. Comenzamos muy bien el grupo de Champions".
Además, también repasó el duelo ante el Benfica, ante quien se logró una contundente victoria y en la que Oyarzabal vivió un momento de lo más especial. "Mi primer gol en la Champions y los mejores 45 minutos de la temporada. Las sensaciones dentro del campo fueron muy, muy buenas. El equipo demostró en esa primera parte de lo que era capaz de hacer y luego ya, en la segunda, jugamos de otra manera, pero conseguimos una victoria muy importante".
El duelo ante los de Javier Aguirre supuso un duro varapalo para los de Imanol. En la tanda de penaltis, el conjunto mallorquín fue capaz de dar la gran sorpresa ante el cuadro local, ya que la Real disputó la vuelta de semifinales de Copa en su estadio. Por ello, la decepción fue todavía mayor, ya que no pudieron brindarle una gran alegría a su afición, que soñaba con desplazarse a Sevilla. Oyarzabal se detuvo en ese momento y lo destacó como uno de los peores, sino el peor, de la temporada. "Fue uno de los momentos más duros de la temporada, a nivel personal el que más. Fue una noche difícil para el equipo, teníamos puesta mucha ilusión en llegar a la final, pero nos quedamos a las puertas y fue muy duro".
Para el futbolista, también supuso un golpe durísimo el fallecimiento de Mitxel Badiola, con quien coincidió en las categorías inferiores de la Real Sociedad. "Este fue, al margen del fútbol, de los resultados, a nivel personal, un momento muy, muy duro. Toda la gente le tenía cariño y aprecio, porque nos ayudó mucho cuando éramos jóvenes. Su trabajo iba más allá de formar futbolistas, formaba personas".
“Nos sentimos felices y muy orgullosos de clasificarnos cinco veces seguidas para Europa, no es fácil, pero queremos darle continuidad”. Además, quiso poner el foco en su masa social, ya que considera que “son muy importantes para nosotros, nos dan mucha fuerza”.