Alvaro Arenillas4 min lecturaEl Real Madrid tiene muchos interrogantes en el horizonte y uno de ellos señala directamente a Luka Modric. El jugador croata finaliza contrato el 30 de junio de 2023 y por ahora no se ha anunciado si renovará o dará por finalizada su etapa como jugador del club blanco; eso sí, su compromiso es seguir en activo al menos hasta el verano de 2024 para disputar la Eurocopa de Alemania con Croacia.
Al concluir el Mundial de Qatar 2022, la prensa no tardó en cuestionar al genio de Zadar por si habían sido sus últimos partidos internacionales. Éste, en vez de dejar la puerta abierta a una retirada, aseguró que no entendía por qué iba a dejar de defender a su país si seguía encontrándose realmente bien físicamente. De ese momento han pasado meses, pero su perspectiva no ha cambiado lo más mínimo; tanto es así que ha sido convocado para disputar los encuentros ante Gales y Turquía.
Croacia cuenta con él, pero no quiere que vea jugar con el combinado nacional como una carga extra de esfuerzo. Por ello, y según señala Sportske Novosti, se le ha ofrecido estar solo contra Gales para después regresar a la capital española sin enfrentarse a Turquía. La respuesta de Modric ha sido firme: estará en los dos partidos.
Volviendo al Madrid, y aunque desde hace tiempo se habla de que podría llegar la hora de que dé un paso atrás, lo cierto es que su rendimiento sobre el verde sigue invitando a contar con él, algo que ocurre con otros ilustres veteranos como Toni Kross o Karim Benzema, quien ya habría pactado con la escuadra de la Castellana continuar al menos hasta 2024.
Respecto al futuro inmediato de Modric, nadie parece dispuesto a dar pistas. Por más que se le ha preguntado a él mismo y a los más allegados, nada se ha filtrado. Carlo Ancelotti, cuestionado justo antes del partido que los merengues empataron a cero con el Real Betis, mantiene el suspense con sus palabras.
“Modric hará lo que crea que debe hacer. Está hablando con el club. No es un problema para mí o para Luka. Él tomará la decisión adecuada. No es un problema”, sentencia el técnico italiano del Madrid.
Modric, quien llegó a la casa blanca en 2012, tiene la potestad de decidir si sigue o no. Se lo ha ganado. Son muchísimas temporadas jugando al más alto nivel. En la presente, la 2022-23, acumula 22 partidos en LaLiga con cuatro goles y dos asistencias, mientras que en Champions League son dos tantos en otros cinco encuentros. Si se va, no será porque su fútbol ha desaparecido.
Así es. En la entidad de Chamartín hace tiempo que trazaron un plan para que el pase del testigo sea lo más confortable posible. No vamos a entrar en comparaciones –sería absurdo–, pero tener en plantilla a Fede Valverde, Dani Ceballos (aún tiene que renovar), Camavinga y Tchouameni da cierta tranquilidad.
Si el genio croata dice adiós, es casi seguro que vendrá alguien de unas características similares que ilusionará al Santiago Bernabéu, pero casi podemos prometer que nada sería más emocionante que ver la renovación de Luka Modric, de un Balón de Oro, del ganador de cinco Champions League vistiendo de blanco.