Para los que ya peinan canas es imposible olvidar uno de los campos más míticos que se recuerdan y desde donde se conectaba, como con tantos otros, en aquel carrusel deportivo que se escuchaba los domingos: el Helmántico.
El estadio de Salamanca ha dicho hoy adiós hasta nueva orden y no podrá acoger partidos ni entrenamientos después de que el Ayuntamiento de Villares de la Reina, a cuyo término municipal pertenece la instalación, haya decretado el cese de su actividad.
Cabe recordar que en este escenario se vivieron grandes partidos en Primera División durante la década de los 70, principios de los 80 y finales de los 90. En aquel entonces era la ya extinta UD Salamanca la que jugaba allí. Ahora lo estaba haciendo el Salamanca UDS en Tercera RFEF.
El motivo del cese de su actividad no es otro que el seguir sin abonar la tasa de comunicación ambiental que reclama el Consistorio de la localidad armuñesa, de entre 400 y 500 euros, para regularizar la situación del estadio.
Una tasa que corre a cuenta del actual propietario del Helmántico, el mexicano Manuel Lovato, que compró el estadio a través de su empresa Desarrollos Empresariales Deportivos SL tras la disolución de la UDS, y que cedió su uso al Salamanca CF UDS, club del que es presidente.
Como han explicado fuentes municipales del Ayuntamiento de Villares de la Reina, no se podrá llevar a cabo ninguna actividad hasta que el Salamanca CF UDS y Lovato abonen la comunicación, por lo que el conjunto blanquinegro no tendrá permitido disputar partidos ni entrenar en el Helmántico (sí realizar tareas de mantenimiento en el césped, gradas...).
No obstante, aunque el montante de la tasa tendría un máximo de 500 euros por las medidas del recinto, el Salamanca UDS debería posteriormente acometer una serie de reformas y mejoras en el quincuagenario coliseo para cumplir con todas las especificaciones que requiere una instalación de este tipo. Y es que tal y como ha confirmado el alcalde Ventura Recio a Salamancahoy, una vez realizada la comunicación ambiental, el club tendrá después que hacer frente a diferentes arreglos en el estadio Helmántico manifestados por el arquitecto que según se calculan rondarían los 30.000-40.000 euros (rotura de cristales, medidas contra incendios, electricidad...).
De esta manera, el Salamanca UDS ya sabe que no jugará partidos oficiales de Liga hasta el próximo 7 de enero de 2024, como mínimo. Una problemática que se le suma a las vividas esta campaña por el retraso de los pagos a los jugadores, según informa dicho medio.