El mexicano Javier Aguirre, técnico del RCD Mallorca, acumula cerca de 500 partidos en España, donde se siente "muy feliz" junto a su mujer, la cual le acompaña en sus experiencias profesionales desde el primer día. "Me ha acompañado en todas y cada una de las 14 ciudades de siete países diferentes en los que hemos estado estos 41 años de casados. Te diría que le gusta más el fútbol a ella que a mí. Como aficionada me dice de repente quién juega. Cuando estamos viendo una serie te pone la Champions, aunque juegue el Real Madrid y ya esté clasificado", comenta en Marca el siempre tan irónico Aguirre, cuyo Mallorca no acaba de arrancar esta temporada: "Llevamos 50 partidos en los que nunca hemos estado en descenso. El año pasado se hicieron cosas buenas con jugadores que llegaron a su máximo rendimiento. Esta temporada, como Javier Aguirre, no he encontrado el buen rendimiento del equipo, por eso estamos con una pobre cosecha de puntos, pero no de juego. En cuanto a juego no estoy tan disconforme, porque hacemos cosas bien, pero luego nos condena un remate, un fallo o una distracción. Te pones a sumar y podrías llevar tres o cuatro puntos más... pero no los tienes".
Un irregular inicio de temporada que, posiblemente, le haya pasado factura también a Cyle Larin, uno de los jugadores más caros de la historia del RCD Mallorca. Sobre ello se refiere también Aguirre: "Es un punto importante porque al jugador se le nota algo. He hablado con Larin y me ha comentado que no había estado sujeto a tanta presión antes. En Suiza estaba más tranquilo, mientras que en el Valladolid llegó como refuerzo de invierno sin mucha presión. Aquí ha sido el fichaje estrella y se generó mucha expectativa a su alrededor. Y por diferentes circunstancias, no está encontrando el gol. Por lo demás, pelea, lucha... y está teniendo oportunidades. Ahora, sin Muriqi, jugará".
Todo lo contrario a Sergi Darder, quien ha tenido muchos menos inconvenientes a la hora de adaptarse al vestuario: "Está muy adaptado, ya es uno más del vestuario, de la familia. Se le ve mucho más suelto con la pelota y haciendo lo que pedimos, él lo nota. Ahora ya es cuestión de que dé un pase, marque un gol... pero está integrado. Además, es mallorquín, de la casa y es el hijo pródigo".
Al margen de ello, Aguirre se ha referido también al actual contexto de LaLiga, en la que esta temporada la salvación se antoja más barata. "La ilusión óptica de no verte en descenso es un punto a favor porque dices 'no estoy en descenso', aunque es verdad que se ha puntuado poco. Estamos cinco o seis equipos a un partido y medio (del descenso). Sí creo que este año por alguna razón, como lo de Girona, esto hace que la permanencia pueda ser un pelín más barata, pero no me puedo fiar de eso. Tenemos que jugar mejor, ganar y meternos en una zona noble", apostilla un Javier Aguirre quien entiende que el Girona, a estas alturas del campeonato, "no se desinflará" y acabará en la zona alta, bien en Champions o en Europa League.