El Mallorca ha hecho todo lo que tenía que hacer ante la Real Sociedad para sacar un buen resultado esta noche en Son Moix. Los baleares han salido con una intensidad tremenda, que han mantenido durante los noventa minutos; se han puesto por delante en el minuto 4, gracias a un golazo de Antonio Sánchez; y en general han cumplido con todo lo que se le pide a un equipo pequeño cuando se enfrenta a un bloque que sobre el papel es mejor que él, pero ni con esas han sido capaces de sacar un buen resultado, por culpa de un gol de Mikel Merino cuando el partido ya agonizaba. Un triste metáfora de la campaña bermellona, en la que prácticamente no está funcionando nada por pequeños detalles.
Si hay alguien que sufre en esto partidos, ese es Javier 'El Vasco' Aguirre, el experimentado técnico mexicano que ha declarado en la rueda de prensa posterior al partido, que le duele "mucho" perder así, y tanto él, como el resto vestuario está "bastante fastidiado". "Tuvimos el puntito muy cerca, y si te hacen cuatro goles, bueno te lo comes, pero perder así duele", recalcó sobre un duelo que han tenido controlado en gran parte de él, más allá de los inconvenientes que les han surgido.
Entre esos problemas destaca principalmente la roja a Antonio Raíllo en los albores de la primera parte, cuando en la misma jugada, Pablo González Fuertes ha decidido sacar dos amarillas al central cordobés, dejando a los locales en inferioridad para todo lo que restaba de encuentro. Pese a ello, Aguirre no ha querido mojarse, ya que no sabe que sucedió y prefiere esperar a sentarse con su pupilo para conocer en profundidad lo sucedido antes de hablar. "No sé que sucedió, no tengo ni idea, los árbitros hacen su cometido y hay que respetarlos. Creo que fue un diálogo entre ellos, pero mañana, con más calma hablaré con Antonio", sostuvo el centroamericano.
Sin duda el partido más importante de la temporada de los mallorquines va a ser el próximo 27 de enero, cuando se vuelvan a enfrentar a la Real Sociedad, pero esta vez en el Reale Arena, donde llegan con el 0-0 de la ida, pero al ser cuestionado sobre si saca alguna enseñanza de esta noche, ha tirado de ironía, ya que ha confirmado que "si ya es difícil ganar a la Real con once, con diez, es imposible". Aún así es optimista de cara a un duelo en el que pueden lograr el hito de clasificarse para una final y asegurar su clasificación para la próxima Supercopa.