R. Madrid
Granada
El Granada, en el debut de Alexander Medina en el banquillo, apenas si dispuso de opciones en el Santiago Bernabéu ante un Real Madrid muy sólido y, encima, se vio obligado a encender las alarmas cuando su estrella, Bryan Zaragoza, pidió el cambio en el minuto 79 del choque al sentir un pinchazo en el gemelo izquierdo.
El futbolista se pudo retirar del campo sobre su propio pie, pero existía una enorme preocupación en el seno del club nazarí acerca del alcance de la lesión, ya que no se puede permitir perder a su futbolista más desequilibrante en una situación tan crítica, penúltimo y con solo siete puntos en su casillero.
No obstante, el nuevo técnico del Granada, Alexander Medina, mandó un mensaje de tranquilidad a la afición nazarí tras el partido y le restó importancia al motivo por el que Bryan Zaragoza se retiró del terreno de juego, indicando que no tiene ninguna gravedad. "Solo ha sido un calambre", afirmó el preparador uruguayo, lo que ha calmado mucho los ánimos después de ver cómo dejaba el encuentro con gestos de dolor.
Más importancia parece revestir la lesión del meta Raúl Fernández, que abandonó el césped en los primeros compases por una dolencia en la espalda. "Habíamos arrancado bien el partido, controlamos bastante el juego y la lesión de Raúl fue una pena, paró el partido y tuvimos que cambiar de portero. Perdí una ventana para un partido largo en el que tenía pensado hacer otros cambios cuando vi al equipo desgastado en el segundo periodo", lamento el 'Cacique', que señaló que ahora se encuentran a expensas de las pruebas: "Haremos una valoración cuando nos pasen el parte médico".
En otro orden de cosas y, a pesar de la derrota, Medina valoró positivamente la actuación de los suyos en su estreno en el banquillo. "Los jugadores me han demostrado que creen en el mensaje. Salieron con mucha personalidad, me gustaron mucho los primeros minutos del equipo, jugando. Según pasó el partido, hubo desgaste, pero en líneas generales he notado receptividad y confianza por parte de ellos. Creen que se puede, hay mucho camino por recorrer, pero hay que rescatar cosas positivas. Competimos ante un rival superior", dijo en rueda de prensa el técnico, que, aunque el Granada no disparó a puerta, ve brotes verdes."El equipo controló bastante durante el partido el mejor arma del Real Madrid, las transiciones. Hay que corregir aspectos, pero se vieron en faceta defensiva muchos de los trabajados entre semana. El Real Madrid no tuvo tantas ocasiones como en sus últimos partidos. Nos ha faltado la faceta de ataque, mejorar las presiones, pero es importante no quedar expuesto ante un equipo de tanta calidad y jerarquía", comentó.El den