Parece que el Girona de Míchel ha dejado de hacer ruido en los últimos meses, pero lo cierto es que sigue manteniéndose a un gran nivel. Real Madrid y FC Barcelona ya les han adelantado en la tabla, pero aun así, mantiene la pelea con otros clubes por entrar en la UEFA Champions League. El equipo de Míchel cuenta con varios nombres propios y uno de ellos es el de Yangel Herrera.
El centrocampista venezolano ya se ve jugando la Champions League en Montilivi la próxima temporada. "Sí, quiero jugar la 'Champions' y me veo jugándola. Es algo que siempre he soñado y podemos hacerlo realidad con el Girona. Tendría muchísimo mérito. Estamos muy cerca y queremos dar ese paso adelante", decía en una entrevista para la Agencia EFE.
Sin duda alguna ha sido un año mágico para los de Míchel, que han mantenido el pulso a los gigantes de nuestra competición durante varias jornadas. "Quizás ahora mismo no somos conscientes de lo que estamos haciendo: alguna vez te paras a pensar en lo que está logrando el equipo, pero no tienes tiempo de disfrutarlo del todo por el día a día. Ganas un partido y te dura uno o dos días porque ya tienes que pensar en el siguiente. Y lo mismo pasa con la derrota. Al final de la temporada entraremos en razón y lo disfrutaremos mucho más", destacaba Herrera.
A pesar de ello, el club en los últimos meses ha dado el bajón esperado aunque se mantiene en la tercera posición. La pelea con el Athletic Club y Atlético de Madrid será muy intensa, ya que podría decidirse en las últimas jornadas. "Creo que se va a disputar hasta las últimas jornadas. Será apretado. Nosotros queremos dar un paso adelante en el Civitas para tener un gran porcentaje de éxito en nuestro objetivo, pero esto va a ser disputado hasta el final porque los equipos con los que estamos luchando son muy buenos", comentaba el venezolano.
El futbolista ha pasado varias temporadas de un lado a otro mientras pertenecía al Manchester City, donde nunca ha llegado a debutar y ha estado desarrollando prácticamente toda su carrera en España. Tras varios años cedido, ahora en Girona goza de cierta estabilidad. "Eso era algo que estaba buscando todos los años: esa tranquilidad de poder centrarme solo en jugar, de establecer a mi familia en un solo lugar. Eso me facilita muchas cosas porque llegaban estas instancias y cada año tenías que pensar dónde estarías el año que viene. Me ha permitido asentarme y trabajar de una forma diferente. Le doy mucha importancia. Era un estrés constante, muy grande. No me gustaba estar así y al final el Girona me ha dado la oportunidad de estar establecido aquí y se lo agradezco mucho", continuaba.
Ahora sus objetivos son dos: jugar la Champions League con el Girona y disputar la Copa América con Venezuela.