Alberto Gálvez4 min lecturaLuis Alberto es sinónimo ya de 'culebrón' en el mercado de fichajes de cada verano. Si el año pasado su nombre sonó con fuerza como posible refuerzo del Sevilla FC y el Cádiz CF, ahora el de San José del Valle vuelve a ser noticia por su última polémica con la Lazio.
Según Il Messaggero, el exjugador sevillista estaba molesto por unas promesas que el presidente Claudio Lotito no había cumplido a día de hoy relacionadas con el acuerdo pactado para su renovación. Un nuevo contrato que todavía no se ha firmado y que debe ampliar su continuidad desde 2025 hasta 2027 y su salario desde los 3 millones de euros a los 4 'kilos' netos (variables incluidas).
Sin ir más lejos, el mediapunta usó ayer sus redes sociales para expresar su malestar con la entidad romana y, través de su cuenta personal de Instagram, lanzó el siguiente mensaje: "Hay un límite tras el que la paciencia ya no es una virtud”.
El conjunto italiano, por su parte, sí que ha renovado en estos días hasta 2024, con una opción para un año más, al exbarcelonista Pedro. Un hecho que también habría podido añadirle más salsa al asunto.
De hecho, no es la primera vez que la relación entre el español y el club biancoceleste vive momentos complicados. Y para sorpresa de todos, esta mañana en Auronzo di Cadore, sede del stage de pretemporada de la Lazio, el gaditano no trabajó con el resto de sus compañeros. Según La Gazzetta dello Sport, se quedó en los vestuarios para hacer terapias debido, en teoría, a una sobrecarga muscular.
Tras la marcha de Milinkovic-Savic, Luis Alberto es una pieza aún más indiscutible en el club romano y en la entidad italiana no temían por su continuidad, pero viendo que el canterano nervionense podría estar replanteándose el fin de su aventura en Italia, han decidido anunciar esta misma tarde su renovación, que se ha cerrado hoy respetando todos los detalles, a falta únicamente de que lleguen los anuncios oficiales.
Sin ir más lejos, hace unos días se conocía que habría recibido la llamada del fútbol árabe. Concretamente del Al-Duhail SC de Qatar, quien estaría dispuesto a ponerle sobre la mesa 40 millones de euros por cinco temporadas.
El conjunto qatarí ofrecía además 12 millones de euros por su traspaso a la Lazio pero el presidente biancocelesti sigue remitiéndose a los 20 millones para permitir su salida del club.
Y aunque Luis Alberto sigue muy de cerca lo que ocurre en la competición española y, en especial, en el Sevilla, su elevada ficha le impide aterrizar de momento tanto en el Sánchez-Pizjuán como en el Nuevo Mirandilla. El último guiño que tuvo el gaditano con los nervionenses ocurrió cuando estos se proclamaron por séptima vez campeones de la Europa League frente a la Roma, momento que no desaprovechó para celebrarlo por las redes sociales y, a través de las cuales, tanto él como su familia recibieron amenazas.