Lo de la final, una vergüenza

Indignación creciente en la planta noble de la RFEF con el reparto de entradas para la final de la Eurocopa que está suponiendo una vergüenza de la que son victimas los aficionados españoles

Lo de la final, una vergüenza
Los jugadores de la Selección celebran el pase a la final - Cordon Press
Manu ColchónManu Colchón 3 min lectura

La fiesta del fútbol de selecciones llegará a su fin este domingo 14 de julio a las 21:00 horas con la final de la Eurocopa 2024. Se enfrentarán España e Inglaterra en lo que promete ser un partido trepidante, con dos selecciones que priman muchísimo el juego ofensivo y para la que el combinado de Luis de la Fuente se erige como una de las principales candidatas a alzarse con el título. Será muy complicado, ya que a pesar de que los británicos no hayan sido (ni mucho menos) el equipo que más ha enamorado a lo largo del campeonato con su fútbol, tienen una nómina de profesionales infinita los cuales pueden decantar la balanza en cualquier situación de partido.

Será sin duda un tremendo espectáculo en el que los españoles tendrán el apoyo de sus aficionados, pero no de todos los que les gustarían. O al menos, de los que corresponderían. Y es que la situación con las entradas para el partido está siendo calamitosa por parte de la UEFA y está levantando una indignación apabullante tanto en la Real Federación Española de Fútbol como en los propios aficionados de 'La Roja'.

Apoyo minoritario

La Selección Española contará con cerca de 11.000 fieles en las gradas del Estadio Olímpico de Berlín en el partido de este domingo ante Inglaterra. Ahora mismo, las entradas ya están agotadas en el rango de los 95 euros, que son a su vez las más económicas. Por otro lado, siguen apareciendo a goteo algunas de que oscilan entre los 300 euros y los 2.000 euros para ver la finalísima. Si el único problema económico fuese este poco sería (dentro de que tener entrada es lo fundamental). A ello se suma la imposibilidad de encontrar vuelos y alojamiento con unos precios desorbitados y con la imposibilidad del aeropuerto de Berlín para recibir más llegadas.

Y para colmo está lo de la UEFA. El máximo organismo del fútbol europeo premia la fidelidad de aquellos aficionados que compraron las entradas con cierta antelación y sobre todo contarán con más facilidad y prioridad aquellos que hayan ido a ver algún partido en el torneo. Esto implica que poco a poco se vaya incrementando la reventa de las mismas con la lacra que ello supone, con algunos precios que han llegado a los 2.000 euros

Tal y como informa en su web la Cadena COPE, fuentes de la RFEF estiman que podrían ser casi 50.000 los aficionados ingleses que acudan al estadio para apoyar a los de Gareth Southgate. Cinco veces más que los españoles. Una situación además a la que no se sabe cómo se ha llegado ya que en principio sólo se le atribuía a cada combinado 11.500 entradas.