Fernando Ruiz3 min lecturaEl internacional español Óscar Mingueza, futbolista del Celta de Vigo, ha sido sancionado con dos partidos por el Comité de Disciplina de la RFEF, por la expulsión que sufrió a la conclusión del partido contra el Athletic Club, y se perderá los encuentros ligueros ante Deportivo Alavés y Valencia, cuando en un principio se creía que la sanción podría quedarse en tan sólo un partido.
Una sanción que, según el acta de dicho Comité, viene motivada "actitudes de menosprecio o desconsideración hacia los árbitros, directivos o autoridades deportivas". El colegiado del encuentro, el madrileño Ortiz Arias, señaló en el acta del encuentro que el futbolista del Celta fue expulsado por decirle por el siguiente motivo: "El jugador se ha dirigido a mí en los siguientes términos: ha habido cuatro faltas y a mi no me pitas ni una, increíble. Eres un chulo".
El jugador del Celta ha sido sancionado con dos encuentros según lo que reza en el artículo 124 del Código Disciplinario relativo a las actitudes de menosprecio o desconsideración: "Dirigirse a los/as árbitros/as, directivos/as o autoridades deportivas en términos o con actitudes de menosprecio o de desconsideración siempre que la acción no constituya falta más grave, se sancionará con suspensión de dos a tres partidos o por tiempo de hasta un mes".
Esta sanción a Mingueza llega poco después de la polémica sanción a Vinicius Junior, que también recibió un castigo de dos partidos por su tan conocida acción con Dimitrievski, al que golpeó en la cara. Considerado una agresión por muchos, lo que le debería haber acarreado una sanción mínima de cuatro partidos y máxima de doce, finalmente fue entendido por el Comité como "violencia deportiva".
En este caso, la redacción que hizo en el acta Soto Grado de la jugada ayudó al futbolista brasileño. Según el colegiado Vinicius fue expulsado por "golpear a un adversario en la cabeza de manera deliberada, sin estar el balón en disputa, empleando una fuerza no insignificante. Una vez expulsado, dicho jugador tuvo que ser sujetado por miembros de su club y retirado a vestuarios mientras continuaban sus protestas".
Ante dicha sanción, el Real Madrid formuló alegaciones al acta del encuentro, aportando prueba videográfica e invocando, con fundamento en la prueba videográfica aportada, la existencia, en su opinión, de un error material manifiesto en la redacción del acta respecto a la expulsión del jugador pero finalmente las alegaciones no fueran atendidas y el brasileño ya cumplió su primer partido de sanción ante Las Palmas y todavía le queda el de este fin de semana frente al Real Valladolid.