Las segundas vueltas son en muchas ocasiones una gran duda. Después del parón de Navidad muchos equipos cambian por completo su dinámica. Por una parte se observa como equipos que llevaban un muy buen nivel hasta diciembre, después caen. Por lo general suele ser por que la plantilla se haya quedado corta, por que se ha perdido el factor suerte... Pero en ocasiones ocurre todo lo contrario, que los equipos remontan. Si hay un momento para hacerlo, para que la temporada no se complique más de lo necesario, es sin duda ahora. En los próximos meses se acercan los partidos más decisivos. Muchos equipos comienzan a tener lesiones y mantenerse alejado de la zona roja es clave. Y en esa dinámica esta el Celta de Vigo.
Los de Claudio Giráldez están demostrando un cambio de tónica bastante importante en lo que va de 2025. Mientras que en la primera vuelta era un equipo que luchaba por salir de abajo, ahora mira a la competición europea. Aunque todo está muy apretado, tras esta jornada se ha colocado en la décima posición con 32 puntos y 9 por encima del descenso. Y todo esto, lo hace el Celta, con una reforma integral de su feudo.
En esta ocasión se le dice adiós a la grada de Gol, muy especial por su antigüedad. Esta grada, con más de 3000 abonados en sus asientos, dejará de estar disponible durante un tiempo. Su reconstrucción se encuadra dentro de la reforma que la directiva viguesa lleva realizando algunos años. Con el pitido final se consumó esa nueva victoria local contra el Osasuna, con otro gol de Iago Aspas, que suma 8 en toda la temporada, a pesar de salir de nuevo desde el banquillo. Y entonces los jugadores del conjunto celtista decidieron acercarse a esta zona de su estadio para decir adiós a la última grada que se mantenía con la antigua estructura del recinto.
Como una buena parte de estadios de La Liga, Balaídos busca con esta reforma aumentar su capacidad. Y se inició en su momento con la reforma de la grada Marcador, inaugurada a principios de 2023. Concretamente con la reforma de la grada Gol se aspira a la cifra de las 28.000 localidades. No obstante el aforo ideal que busca conseguirse es de unos 35.000 asientos, en palabras del director de infraestructuras del Celta, Carlos Mao. Por otra parte, los socios que se ubicaban en la zona del recinto que comenzará a reconstruirse tendrán que ser reubicados al menos hasta la temporada 2027-28.
Hasta esa fecha no se tiene previsto el final de las obras, y que en especial, en esa grada permitirán dar el salto hasta las 6400 localidades, frente a las casi 4.000 actuales. El proyecto de esta zona en concreto podrías ascender a un precio que rondaría los 25 millones de euros que serán financiados entre el ayuntamiento de la ciudad y la diputación de Pontevedra. Todo esto se enmarca como se ha comentado en un contexto de renovación total del estadio donde se instalarán los servicios necesarios para dotar de conexión 5G a todo el recinto o en el que se construirán nuevas salas que sumen hasta 800 metros cuadrados entre oficinas de operaciones del club, oficinas de abonados...
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