José Antonio Rivero4 min lecturaEl Cádiz CF vio como este viernes perdía dos puntos ante el Getafe en el minuto 106, con más de 10 minutos de descuento, y con un penalti señalado por mano del 'Pacha' Espino. Las decisiones arbitrales y, sobre todo, el final del partido, calentaron el ambiente en el Nuevo Mirandilla, pudiendo perder el conjunto gaditano mucho más que dos puntos.
Después de que Enes Ünal convirtiese la pena máxima, Iza fue expulsado por agredir a Juan Iglesias durante la celebración del gol del Getafe, pero la tangana continuó en el túnel de vestuarios.
Con las cámaras ya sin poder grabar, solo el acta arbitral puede dar a conocer lo que ocurrió, algo que también podría meter en un problema al Cádiz.
El colegiado del encuentro, Hernández Hernández, escribió que Conan Ledesma, portero del Cádiz, quiso agredirle mediante un empujón a otro compañero. La sanción para el argentino dependerá de la interpretación del Comité, aunque el caso más grave se expone a una sanción de entre cuatro y doce encuentros, según el artículo 145.3 del código disciplinario de la RFEF.
"Otras incidencias: (Jugador: Jeremias Conan Ledesma) Cuando nos encontrábamos en el túnel de vestuarios estando detenidos sin poder acceder al mismo, el jugador local Jeremias Conan Ledesma empujó a un compañero de equipo que se encontraba pegado a mi espalda con el objetivo de que éste impactase contra mí, consiguiéndolo", escribió Hernández Hernández.
Por si esto fuera poco, el acta arbitral también afirma que Juan Cala agarró "fuertemente y de forma persistente" el brazo del colegiado, y que el presidente, Manuel Vizcaíno, y el delegado del Cádiz, Salvador Chirino, tuvieron que intervenir para que los árbitros llegasen a su vestuario.
Además, también fue expulsado Bocardo Vidal, entrenador de porteros, y el segundo entrenador, Diego Ribera.
Tras el partido, el entrenador del Cádiz, Sergio González, mostró su enfado con lo ocurrido con los árbitros, queriendo mandar "un mensaje" al "estamento arbitral". Que "se ponga mucho las pilas, si cada decisión es vital para todos los equipos", indicó.
"Nos jugamos la vida, los chicos se matan, se dejan la vida y luego alguna persona externa pues hace que realmente se vaya todo al traste", afirmó Sergio, que no entendía los 10 minutos de añadido. "A nosotros, por reglamento, parece que son diez minutos (de descuento) todos los partidos, diez minutos ha sido una puta barbaridad", espetó.
"Parece que hay una prórroga en nuestros partidos. Siempre son 10 minutos en casa. Da la sensación de que parece que cuesta vernos por delante, pero no quiero hablar del árbitro", siguió diciendo Sergio, que también se mostró muy crítico con los dos penaltis señalados al Getafe. "Son dos penaltis muy, muy rigurosos. El primero mirando de espaldas a la portería y el segundo Espino tiene la mano apoyada y habían pasado 10 minutos y 20 segundos. Estoy muy caliente y enfadado, pero prefiero quedarme las cosas para mí", concluyó.