El Real Betis maneja desde hace semanas un ofrecimiento interesante para la posición de pivote que dejará huérfana Guido Rodríguez, a dos semanas de acabar contrato. Con Johnny Cardoso y Sergi Altimira en esa demarcación, los responsables verdiblancos tienen pactada la continuidad de Marc Roca, seguramente con la segunda cesión que facilita el no ascenso a la Premier League del Leeds United para no hipotecar la partida presupuestaria que se destine a fichajes, si bien la idea es quedarse en propiedad con el ex del RCD Espanyol más pronto que tarde. Con William Carvalho de nuevo en el mercado por imperativo económico (tiene la segunda ficha más alta de la plantilla, que no es acorde a su rendimiento), se buscará un centrocampista de corte defensivo, apareciendo en este contexto el nombre de Walace Souza (29), que, curiosamente, fue objetivo del Sevilla FC en 2015, cuando aún jugaba en la Série A, y en las siguientes ventanas, ya en la Bundesliga.
Brasileño y canterano de Gremio, no tiene pasaporte comunitario, aunque la venta a principios de este año de Luiz Henrique al Botafogo, la inminente de Abner Vinícius al Lyon y la esperada de Willian José, que tiene desde verano un acuerdo económico con el Palmeiras, el apartado de cupos foráneos quedará diáfano en La Palmera. De sobrada experiencia, el de Salvador se curtió en Alemania (en el Hamburgo, que pagó nueve millones de euros por él, y el Hannover 96, que abonó seis y los recuperó al mandarlo a Udinese) antes de llegar cinco años atrás a Italia. Tiene contrato en vigor con los blanquinegros hasta 2026, pero no las puertas cerradas por un precio justo, a pesar de que no ha dejado de ser fijo para su entrenador, Gabriele Cioffi (dos goles en 38 partidos, con 3.333 minutos en su haber). Seguramente no se fíe del nuevo, Kosta Runjaic.
En el Friuli piden seis kilos por Walace, lo mismo que les costó, una cantidad todavía elevada para las pretensiones del Real Betis, donde están tranquilos ante esta posible operación, puesto que los otros dos clubes que han preguntado por el medio defensivo, Flamengo y Corinthians, tampoco quieren gastar tanto. Encima, el futbolista entiende que sigue teniendo recorrido en Europa, por lo que ha pedido a sus agentes que prioricen las alternativas en las cinco grandes Ligas antes de plantearse un retorno a Brasil, que desea más adelante. En La Palmera entienden que dilatar los contactos, llegado el caso de que Souza sea finalmente el elegido, aumentará las posibilidades de que Udinese acepte una cantidad más baja o, incluso, un préstamo con opción de compra, a sabiendas de que deben aprovechar su buen momento para venderlo esta campaña y no arriesgarse a que llegue a su último año de contrato, con la treintena cumplida y, por ende, con menos opciones de recaudar.