El sueño de la saga Lopera y el 'respaldo' de Unai Emery

El nombre de Manuel Ruiz de Lopera quedará para siempre ligado a la historia del Real Betis. Este lunes se cumple un año del fallecimiento del ex presidente verdiblanco, pero su saga continúa vinculada al mundo del fútbol. El grupo empresarial heredero del peculiar dirigente, con su sobrino Javier Páez a la cabeza, ya tuvo una primera experiencia al frente del CD Gerena, tras intentar sin éxito hacerse con el Extremadura UD, y ahora presume de haber reflotado al Zamora CF, al que tiene a dos puntos del 'play off' de ascenso a la Categoría de Plata en el Grupo 2 de Primera RFEF, tras abonar casi dos millones de euros el pasado verano al anterior propietario, Víctor de Aldama.

"Ahora mismo nosotros tenemos muchas aspiraciones, pero primero mantenernos. Es un proyecto precioso de tres años, pero lo que podamos conseguir antes mucho mejor. Queremos asentarnos en Segunda división. Es mi ilusión. Pero es fútbol. Es muy ingrato. Muy bonito, pero muy ingrato muchas veces", aseguró el máximo mandatario del conjunto castellano-leonés en una entrevista en Relevo, donde desveló que no son pocos los que piensan que puede lograr esa meta, entre ellos un ilustre ex sevillista: "Fuimos a jugar contra el Real Unión y estaba Unai Emery conmigo. Venía de Valencia, que había estado haciendo unas cosas, y estuvo allí viendo el partido y me dijo, palabras textuales, 'tienes un equipo de 'play offs''. También el presidente de la Real Sociedad estuvo viendo su filial y después del partido me dijo lo mismo. Y yo digo, 'hostia, todo el mundo me lo dice, pero a ver si tengo suerte y me meto'".

Páez saca pecho por una gestión que ha devuelto la ilusión a la afición zamorana. "Un equipo que tenía casi 3 millones de deudas, la institución totalmente rota... Hacer una plantilla en un mes y pico, para competir y con opciones de 'play offs', creo que es muy difícil. Y más en esta categoría, que cualquiera le gana a cualquiera", explicó, recordando al mismo tiempo que el propio Lopera nunca descartó emprender una aventura tras abandonar la entidad de La Palmera. "Siempre, aunque Lopera ya no estaba metido tanto en el fútbol, le gustaba. Yo le decía, 'me han ofrecido un equipo'. Y él me respondía, 'bueno, a ver, tú entérate, a ver cómo va'. Siempre. Teníamos la ilusión, porque nosotros, en verdad, cuando ya nos quitamos del Betis, teníamos que reinvertir el dinero utilizado por el fútbol. Estuvimos en la Tercera División y no nos fue bien. Llegó un paraguayo y nos pagó lo que lo invertimos. Nos fuimos. Nuestro planteamiento es de no tener socios. Nosotros dependemos de nosotros mismos porque somos personas que hemos vivido esto mucho. Yo entré en el Betis en 1992 con mi tío, llevaba 30 años al lado de él. He estado con Luis Aragonés, Víctor Fernández, Lorenzo Serra Ferrer... y te puedo decir que viajaba diariamente con ellos cuando estábamos en LaLiga. He vivido de todo. Y sé lo que es el fútbol. Sé las penurias del fútbol, y que cuando entra la pelotita eres el mejor, y cuando no entra la pelotita eres muy malo. Y esto del fútbol es así", recalcó.

Las sensaciones para el derbi y las primas de Lopera

Desde la distancia, además, el sobrino de Lopera admite que estará muy pendiente de El Gran Derbi de este próximo domingo, recordando como el empresario de El Fontanal vivía estos partidos de una forma muy especial. "No me da tiempo verlo allí, pero lo veré en Zamora. Espero que mi Betis que le gane a Sevilla. Yo creo que tenemos mucha mejor plantilla y pienso que es el momento de ganarles. Para pegar un golpe de efecto, sobre todo en estos derbis que siempre nos comen desde que falleció Ruiz de Lopera. Cuando estaba él, yo creo que los derbis eran mucho más igualados, y ahora se pusieron un poquito más a favor del Sevilla. Pero yo pienso que este es el momento. A mi tío le gustaba mucho, antes de los derbis, comer con los futbolistas o darles sus primas, las de los cheques regalos. Cosas de estimulación, de tener al equipo contento. Pero esa semana convivía mucho más de lo habitual con los futbolistas, con el cuerpo técnico, hacíamos comida... hacíamos cosas diferentes. Sobre todo los cheques, los regalos típicos que daba de El Corte Inglés por ganar al Sevilla. Los derbis siempre son diferentes para todo", sentenció.