El Real Betis tiene en mucha consideración a Álex Pérez, central reclutado del Rayo Vallecano hace dos veranos y que ha tenido bastante continuidad en el juvenil A de Arzu y, en las postrimerías, de Dani Fragoso, tras la promoción del nazareno al Betis Deportivo por la marcha al Albacete Balompié de Alberto González. Terminó el madrileño la temporada lesionado, pero antes jugó en Segunda RFEF y lució en verano la camiseta del primer equipo durante el 'stage' en tierras alemanas ante la ausencia de hombres específicos en su posición, lo que quiere decir que Manuel Pellegrini le valora y conoce, así como que su nombre surgió del área que coordina Miguel Calzado. Por eso mismo, sorprende que la relación entre el hispano-mozambiqueño y el club al que pertenece hasta el 30 de junio de 2025 se esté enrareciendo y pueda acabar mal.
Lo adelanta el especialista de 'Relevo' en el mercado Matteo Moretto, que deja entrever la posible presión del futbolista y su representante (que también lo es, por ejemplo, de Héctor Bellerín, Yanis Senhadji y Álex Collado) hacia una institución con la que mantenía un diálogo fluido y positivo siempre. Y es que a Los Bermejales no ha llegado o no acaba de convencer la oferta del Inter de Milán, que plantearía una cesión con opción de compra cifrada en unos 900.000 euros por Álex, que jugaría un año en el filial de la Liga Primavera y ascendería luego a la primera plantilla o se iría a préstamo, ya como 'neroazzurro' en propiedad, a otro conjunto de las Series A o B para foguearse. Previamente, tendría que renovar aquí, una exigencia desde la distancia que no ha gustado demasiado en Heliópolis, donde habrían preferido una consulta o negociación directas, no a través de intermediarios.
Dependiendo la fuente consultada, pues las hay que niegan cualquier tipo de gestión en marcha, la tesitura es más o menos delicada. A última hora, habría aparecido en escena el Udinese, aunque Pérez solamente quiere ser interista y desliza que, si no hay acuerdo entre lombardos y verdiblancos, 'conditio sine qua non' para que prolongue su vinculación, apuraría su contrato para marcharse gratis el verano del año que viene, tras un año, entonces, casi seguro en la grada. Desde todos los bandos confían en que la sangre no llegará al río y que terminará habiendo un entendimiento. Calzado y sus colaboradores, como han demostrado dejando ir a Yanis, siempre han buscado el bienestar de los jugadores, sin olvidar por supuesto que trabajan en una entidad que necesita plusvalías y canteranos que escalen hasta la escuadra matriz.