La trasferencia del Real Betis más fácil de los últimos años se ha convertido en un 'culebrón'. La salida de William Carvalho al Al-Nassr saudí parecía cerrada hace ya más de una semana y, de hecho, era un negocio que venía bien a todos, pero a día de hoy sigue enquistada y, aunque se espera que finalmente haya acuerdo en breve, siguen pasando las horas y no tiene lugar la esperada firma.
La operación era rentable para el Betis, que entre la cláusula de dos kilos y el sueldo liberaba 10 millones de euros; para el Al-Nassr, que firmaba a un jugador 'Top', con no demasiada edad, por sólo dos millones de euros; y para William Carvalho, que iba a doblar su ficha. Sin embargo, el jugador pidió que subieran esa cifra y eso lo frenó todo... de momento.
Entre tanto, el Al-Nassr se encontró con las protestas de sus propios aficionados, que veían cómo uno de sus rivales, el Al-Ittihad, fichaba a Karim Benzena y se hacía con un pivote como N'Golo Kanté, con más caché que Carvalho. Incluso acudieron a las redes sociales y pidieron que no ficharan al centrocampista portugués.
Sea esto o que las negociaciones con los agentes de Carvalho siguen cerrando flecos, la realidad es que, entre medias, el Al-Nassr se hizo ayer con el fichaje del delantero camerunés Cedric Bakambu, que quedaba libre el 30 de junio tras jugar este año en el Olympiacos, y llegó a un acuerdo con el Chelsea para incorporar a Ziyech, un jugador con el que contentaba a la afición y que será un buen lugarteniente para Cristiano Ronaldo.
El Betis está a la espera de que se cierre la operación para hacer lo propio con los fichajes de Héctor Bellerín y Marc Roca, con los que está todo acordado, y subir la oferta por Ayoze Pérez, con el que sí está encontrando más dificultades, ya que el jugador tinerfeño quiere estar en el primer nivel salarial, al llegar libre y haber demostrado en los meses que ha jugado en el equipo verdiblanco que es el jugador diferencial y desequilibrante que se presuponía.
El traspaso de Willliam Carvalho, no obstante, no debería correr peligro. En el Betis esperan que, si no queda finiquitado entre hoy y mañana, lo haga a lo largo de la semana próxima y Pellegrini pueda empezar la pretemporada con las nuevas incorporaciones.