Manuel Pellegrini no se caracteriza por ser un técnico que niegue oportunidades y tarde o temprano termina concediendo minutos a todos los efectivos del plantel, aunque, eso sí, destaca por su rigidez con los plazos y solo abre la puerta cuando considera que un futbolista se encuentra listo para responder sobre el campo, lo que ocurre con los efectivos que llegan de una lesión o con poco rodaje.
Por ello, en el arranque de la temporada le ha cerrado durante un tiempo la puerta del once a Ricardo Rodríguez, al considerar que no había aterrizado a tono en el Benito Villamarín a principios de agosto tras terminar en el Torino e iniciar la preparación prácticamente desde cero.
Así, a excepción de la Conference League, donde utilizó a la segunda unidad por el nivel del Kryvbas, en Liga solo disputó 45 minutos en los primeros cuatro partidos, mientras que el resto correspondieron a Romain Perraud, titular indiscutible en el carril zurdo del Betis 24/25.
Claro que la maratón de partidos entre los dos parones internacionales fuerza a Pellegrini a realizar rotaciones para dar descanso a los más empleados, por lo que, tras concederle la segunda parte ante el Leganés, el chileno decidió entregarle la camiseta de titular al internacional helvético contra el Mallorca y lo cierto es que quedó en evidencia que todavía no ha alcanzado el tono físico necesario y que encaja menos en el sistema de Pellegrini que Romain Perraud, aunque debe ser una cuestión de tiempo.
Contra los bermellones, descendió considerablemente la aportación ofensiva del carril y todo se centró en el desequilibrio de Abde, habitualmente apoyado arriba por Perraud pero poco auxiliado por Ricardo Rodríguez, muy ausente en ataque. Cabe recordar que, a sus 32 años, en el último año en el Torino lo habían reconvertido prácticamente a central, posición en la que disputó casi todos los partidos. Así las cosas, sus estadísticas recogen que no realizó ningún regate y que apenas si se prodigó en ataque, con un bajo riesgo en el pase, como demuestra un porcentaje alto, del 87%.
Atrás mostró más seguridad en sus acciones, pero se despistó en varias ocasiones de manera letal, sobre todo en el 63, cuando dejó solo en el segundo palo a Robert Navarro, cuyo remate detuvo Rui Silva.
Así, Pellegrini le sustituyó en el 69' decidió ganar más profundidad con Perraud y lo cierto es que galo llegó en varias ocasiones la línea de fondo y generó más peligro que el suizo, evidenciando la diferencia existente a día de hoy entre ambos. que genera el problema de un desequilibrio en la izquierda que, por ahora, obligará a Pellegrini a cargar de minutos a Perraud.
Al final del partido, Ricardo aseguró que estaba listo para 90 minutos, pero su rendimiento sobre el campo no dijo lo mismo.