Poco a poco se van apagando las voces que desde Argentina apuntaban a un regreso de Germán Pezzella a River Plate. Desde el Betis están tranquilos en este sentido, como indicó Manu Fajardo en la presentación de Perraud, cuando aseguró no tener noticias al respecto y habló de simples rumores al referirse a la situación del defensor.
La confianza mostrada desde Heliópolis en el argentino es total. A sus 33 años, viene de ser un fijo para Pellegrini en la 23/24 y se le considera pieza importante de cara al próximo curso, aunque deberán llegar dos centrales más tras las salidas de Chadi Riad y Sokratis, quedando sólo el propio internacional albiceleste y Marc Bartra, cuyo estado físico tras su grave lesión habrá que evaluar.
El hecho de que la cláusula de rescisión de Pezzella, con contrato hasta 2026, sea de sólo 5 millones de euros había alimentado la posibilidad de una salida. Pero en el Villamarín no sólo no han recibido ninguna oferta, negándose en rotundo a negociar por debajo de esa cifra, sino que el que propio jugador tampoco ha llegado a un acuerdo con los ‘Millonarios’, que lejos de hacer honor a su apodo no pueden pagar su salario pese a que el zaguero estaría dispuesto a rebajarlo, aunque no tanto como pretenden en el Monumental.
Además, la llegada del sevillista Gattoni, cerrada a falta de detalles, parece cerrarle la puerta al central verdiblanco, que ve cómo River sí está sacando la cartera para reforzar otraqs posiciones. No en vano, además de pactar una opción de compra de 3,2 millones de euros por el aún futbolista nervionense, no descarta pagar la misma cantidad para abonar la cláusula por el delantero Adam Bareiro, de San Lorenzo. Además, desembolsará casi 5 kilos al Cádiz por Conan Ledesma y se hará con la cesión del lateral zurdo Franco Carboni con opción de compra de 4 millones.
Parece evidente, por tanto, que Pezzella no es una prioridad para el conjunto de Buenos Aires, que ha tentado también sin éxito a Valentín Gómez, otro jugador que se desempeña en su posición y al que Vélez Sarsfield ha cerrado la puerta. Pero, mientras tanto, el jugador verdiblanco prefiere mantener la cautela, afirmando al ser cuestionado por su futuro que se pronunciará al respecto tras la finalización de la Copa América.
“No es momento de hablar de eso, tengo la cabeza puesta en intentar dar lo mejor de mí y aportar desde donde me toque, ya después habrá tiempo para todo el resto”, aseguró en rueda de prensa previa al partido de la próxima madrugada ante Perú, el último de la fase de grupos para Argentina, ya clasificada para cuartos de final.