Alejandro Sáez3 min lecturaLa marcha de Nabil Fekir y el retorno de Giovani Lo Celso a Heliópolis fueron los nombres propios del cierre de mercado en clave verdiblanco, quedando en nada otros movimientos como la posible salida de Rodri Sánchez al RCD Mallorca o la llegada de Álvaro Valles para la portería.
Finalmente, el Benfica se decantó sobre la bocina por el portero del Farense Ricardo Velho, continuando Rui Silva un año más como bético y cerrando la posibilidad de que en las últimas horas de la ventana de transferencias hubiera un nuevo movimiento bajo palos, más allá de la vuelta de Adrián San Miguel semanas atrás.
Sin plazas libres en la portería y sin intención ninguna de prestar a Fran Vieites, el Betis mantiene el plan establecido, disponiendo de un preacuerdo con el cancerbero de La Rinconada que es válido desde el 1 de enero de 2025, cuando ya puede comenzar a negociar como agente libre, pues afronta su último año de contrato. Mientras tanto, la UD Las Palmas ha impuesto la presión como estrategia, mandándolo a la grada si no renueva, tras haber rechazado clubes que le presentaban una salida como solución, siempre desde la perspectiva amarilla.
Ahora, con el mercado ya cerrado, desde la isla apuntan a que el Betis ha dejado tirado al portero, en un nuevo intento de tensar la cuerda y reconducir la situación en beneficio del club insular. Al respecto ha sido cuestionado su técnico, Luis Carrión, quien se ha referido en rueda de prensa a ello. "Con el tema Valles, con naturalidad", dijo el preparador, quien apuntó que intentará "que todo el mundo esté lo mejor posible", mirando "adelante" y centrándose en la plantilla que tiene. Un plantel del que Valles no forma parte de manera efectiva, teniendo el técnico con orden de arriba para que se quede en la grada mientras se soluciona su situación.
Cillessen y Dinko Horkas le han arrebatado por ahora el calor de la afición amarilla, habiéndose olvidado ya en la grada el "¡Valle, quédate!" que tan habitual era tiempo atrás. Por el momento, Álvaro Valles ya ha comprobado en primera persona que el guardameta del filial está por delante de él para Carrión, por lo que ahora habrá que ver si es capaz de aguantar todo el año en la grada esperando a 'su' Betis o si, finalmente, sucumbe a las presiones amarillas. En Heliópolis, sin embargo, todos confían en que se acabe resolviendo con la entrada del nuevo año.