Entre los frentes que mantiene abiertos el Betis de cara a la próxima temporada se encuentra, sin duda, el futuro de Guido Rodríguez, pieza clave en los planes de Pellegrini y que termina contrato el próximo 30 de junio.
A día de hoy, a falta de tres meses para que finalice oficialmente su vinculación con el club heliopolitano, todavía no se ha alcanzado un acuerdo entre las partes a pesar de que se han producido nuerosos contactos y que se hablaba de una reunión que acercaría posturas. Cabe recordar que en la previa del choque de vuelta ante el Dinamo de Zagreb de la Conference League, Ángel Haro aseguró que la oferta de renovación que tenía sobre la mesa había caducado por falta de respuesta y que para que siguiera tendrían que empezar de cero.
A partir de ahí, se produjeron una serie de gestos por parte del pivote que gustaron a la entidad, con mensajes en los que dejaba claro su deseo de continuar, especialmente tras el nacimiento de su hija Renata, y se emplazaron a un encuentro con el fin de dar pasos al frente que, sin embargo, todavía no se habría producido. Así, ESTADIO Deportivo informó el pasado 14 de marzo que no había ningún acuerdo todavía, pero que este asunto debía resolverse para bien o para mal en un escaso plazo de tiempo, preferiblemente antes de que acabara este mes o a principios del siguiente para el que el Betis puede encauzar su planificación.
En este contexto, se ha producido una circunstancia que aclara el futuro del argentino, tanto en cuanto se cierra prácticamente de las puertas por la que podría salir Guido una vez que quede libre. En este sentido, hace tiempo que está sobre la mesa el vivo interés del Atlético de Madrid por hacerse con los servicios del argentino con la carta de libertad de cara a la 24/25.
Sin embargo, el club colchonero ha anunciado la renovación de Koke Resurrección hasta 2025, por lo que no saldrá gratis este verano y no dejará una vacante en el centro del campo rojiblanco. Simeone le está utilizado como mediocentro y, aunque no realiza exactamente las mismas tareas defensivas que Guido, no cabe duda que su continuidad no entraba en los planes del entorno del bético y complica sobremanera la llegada del argentino al Civitas Metropolitano, hasta el punto de que este destino pierde fuerza casi de forma definitiva.
Sin duda, un impulso que llega en el momento justo de la negociación y que podría ser definitivo de cara a su deseada permanencia en el Benito Villamarín. Pronto podría haber novedades,