El Real Betis se reencontró con la victoria en LaLiga a lo grande. No sólo tuvo que hacer frente a un rival directo como el Villarreal que queda ahora a sólo dos puntos, sino que le tocó sufrir un desastroso arbitraje por parte de Cuadra Fernández, que enervó a todos los verdiblancos. El cabreo en la expedición verdiblanca fue monumental, desde Manuel Pellegrini hasta Ángel Haro, que tachó de "insulto" la actuación del balear, pasando por Manu Fajardo, que se expone a una sanción al recriminar al colegiado en el descanso la diferencia de "criterio" que viene sufriendo su equipo a lo largo de esta temporada.
La expulsión de 'Chimy' Ávila apenas dos minutos después del gol de Vitor Roque, sin que Pizarro Gómez alertase a su compañero desde el VAR de que la falta solo era merecedora, si acaso, de amarilla, dejó al equipo de las trece barras con un futbolista menos durante una hora. Pero no fue lo único que indignó al beticismo, que vio cómo el árbitro mostraba además tres amarillas en 30 segundos por protestar y posteriormente amonestaba también a Vitor Roque mientras parecía mofarse de él, además perdonarle la roja a Baena por una entrada idéntica a Romain Perraud para cortar una contra.
Todo ello hizo que otro protagonista del choque quedase en un segundo plano. Como se preveía, el medio millar de aficionados béticos que se dio cita en el Estadio de La Cerámica no le perdonó a Ayoze Pérez su salida de Heliópolis el pasado verano, cuando aceptó una oferta económica superior del conjunto castellonense y obligó a la entidad de La Palmera a traspasarlo por sólo 4 millones de euros, al estar así estipulado en su contrato.
Cada vez que el atacante tinerfeño, que 'amenazaba' a su ex equipo con 7 goles en el campeonato liguero, agarraba un balón, se escuchaban con fuerza los pitos de una hinchada verdiblanca que por momentos se hizo notar bastante más que la local. Hasta tan punto fue así, que el propio técnico del 'submarino', Marcelino García Toral, lanzó un 'dardo' a sus seguidores al entender que no les dieron ese impulso extra que necesitaban.
Pero, sin duda, lo que más enfadó al beticismo, tanto en el campo como en las redes sociales, fue el gesto del internacional en el tramo final del encuentro, donde saltaron chispas. Fruto de su impotencia en busca del empate, Ayoze persiguió un balón en el área y se acabó desentendiendo del mismo para acabar golpeando a Fran Vietes, lo que que hizo que Marc Bartra mostrase su malestar por las formas de su ex compañero. Finalmente, todo quedó en una falta que dio algo más de aire al cuadro verdiblanco, que acabó celebrando un valiosísimo 1-2 pese a todo.