Óscar Murillo4 min lecturaAntony Matheus da Silva se convertirá esta semana, si no hay un giro radical de los acontecimientos, en el primer fichaje invernal del Real Betis, que peina el mercado en las dos semanas que restan para encontrar también un delantero centro de garantías (para lo que, si no consigue 'colocar' a Cédric Bakambu, Ricardo Rodríguez y/o Juanmi Jiménez, podría aprovechar la plaza que libere con su cesión Iker Losada). El extremo brasileño había dado su consentimiento a jugar de verdiblanco y sólo restaba que el principio de acuerdo alcanzado el domingo con el Manchester United se plasmara en papel. El último fleco por recortar ya este lunes era la aprobación del técnico de los 'red devils', Rúben Amorim, que pedía un recambio de garantías para las bandas, recibiendo la confirmación de la cúpula mancuniana de que tendrá al deseado Patrick Dorgu pese a la intromisión a última hora del Nápoles.
Algunos medios daban por hecho ya que el Lecce había aceptado la propuesta de los ingleses, cifrada en 35 millones fijos y cinco en variables, aunque Gianluca di Marzio (Sky Sports Italia) defiende que los partenopeos bloqueaban esa transacción, pues se debaten entre el sevillista Dodi Lukébakio, el deportivista Yeremay Hernández y el danés de ascendencia nigeriana como destinatarios de la fuerte inversión prevista con los 75 millones recibidos del PSG por el georgiano Khvicha Kvaratskhelia. Sin embargo, otro de los extremos que más gustan en el Stadio Diego Armando Maradona es Alejandro Garnacho, propiedad del United y al que liberarían gustosos si los 'azzurri' se olvidan de Dorgu. Con esa vía más o menos diáfana, no quedaban ya pormenores que arreglar en el trato por Antony, que tiene previsto viajar entre el martes y el miércoles a la capital hispalense para firmar hasta 30 de junio de 2025, sin opción de compra, aunque con la promesa de estudiar la prórroga de la cesión si todos están contentos.
Según ha podido confirmar ESTADIO Deportivo, el Real Betis se hará cargo finalmente de menos de la mitad de lo que le falta por percibir al paulista esta campaña. Con un salario de 12,3 millones de euros brutos, afrontarán en Heliópolis casi 2,5 antes de impuestos (el 45% allí) o, lo que es lo mismo, 1,7 netos, pagándole el resto el United, aunque, según desvela 'Abc', se ha cubierto las espaldas con pluses por objetivos que pasan por la clasificación para la Champions League o la Europa League y/o la conquista de la Europa League. Pagaría, por ende, una cantidad extra el cuadro de La Palmera si la participación de Antony ayuda en la consecución de esos objetivos que, por otra parte, se traducen en ingresos extra para el club de las trece barras, que no pagaría nada más si el jugador disputa al menos la mitad de los encuentros oficiales para los que esté disponible (titular o segundas partes completas), con 20 asegurados entre LaLiga y la UECL.
