Óscar Murillo3 min lectura"Obviamente, estos dolidos y golpeados por el resultado. Creo que fueron dos jugadas desafortunadas en el primer tiempo; nos fuimos con el marcador en contra (al descanso) y ya todo fue cuesta arriba. Hasta ese momento no habían pasado muchas cosas en un partido que estaba controlado", resumía a pie de campo Giovani Lo Celso, protagonista de un Real Betis que acababa de perder por segunda jornada consecutiva, tercer partido seguido si se cuenta el del jueves en Conference League ante el Mladá Boleslav, para permitir que la Real Sociedad superase en la clasificación de Primera división a los verdiblancos, con ambos pugnando por engancharse a los puestos que darán derecho a final de curso a participar en competiciones europeas, las mismas de las que disfrutan (por decir algo) tanto los de Imanol Alguacil como los de Manuel Pellegrini.
Visiblemente cariacontecido, el mediocampista rosarino, que volvió a la media punta y no estuvo en el doble pivote junto a Sergi Altimira, como en la República Checa, era cuestionado sobre si hay ya motivos de preocupación al haber sumado únicamente dos puntos de los últimos doce en juego en el campeonato doméstico de la regularidad: "Seguro que debemos corregir lo que estamos haciendo mal y tener autocrítica. Pero también tenemos que estar todos juntos. El miércoles tenemos Copa del Rey y, después, viene el Barça. Toca 'masticar' bronca y pensar en lo que viene". Una expresión muy argentina la del zurdo para referirse a la resignación lógica que impera en estos momentos en un vestuario donde, más allá de las muchas e importantes bajas por lesión, el encargado de tocar las teclas adecuadas no las está pulsando ni encontrando soluciones.
Por último, el ex del Tottenham ve "normal" el enfado de la afición "cuando no se dan los resultados", porque no es para menos: "Ya sabemos que estamos en un club grande, así que debemos exigirnos todos. Dar la vuelta a la página, porque queda mucho por delante". Sin embargo, avisa de que antes hay que reparar en lo que no se ha hecho bien: "En el segundo tiempo controlamos un poco más el partido; ellos se agruparon bien atrás y nos costó encontrar los espacios. Hay que corregir lo que se ha hecho mal". Pasó por encima el '20' de valoraciones sobre la única acción realmente polémica del duelo, el penalti 'light' del primer tiempo en el que Romain Perraud roza a Mikel Oyarzabal en su intento de despeje. Aquí, Hernández Maeso señaló el punto fatídico; en una acción idéntica durante el Real Betis-Getafe CF de Luis Milla sobre Pablo Fornals, nada de nada.
