El Real Betis ha realizado este miércoles su tradicional ofrenda floral al inicio de cada nueva temporada y en esta ocasión lo ha hecho ante los titulares de la Hermandad de la Macarena, quienes han demostrado que también tienen espacio para la devoción futbolítica con unos marcados sentimientos verdiblancos. En torno a las 14:00 horas llegaba a la basílica de Santa María de la Esperanza Macarena una amplia expedición del club, con el consejo de administración al completo, todos los miembros del cuerpo técnico y la primera plantilla -incluido Luiz Felipe Ramos, que aún sigue con su futuro en el aire por el interés del Al-Ittihah-.
"El Real Betis Balompié quiere reconocer de esta manera la enorme devoción que tiene la Virgen de la Esperanza en Sevilla y fuera de ella, así como la labor social que realiza su Hermandad, que cuenta con más de 17.000 hermanos. Asimismo, será un emocionante momento de encuentro con los muchísimos béticos de los populares barrios de la Feria, San Gil y la Macarena", destacaba el club de La Palmera antes de ser recibidos por la junta de gobierno de la corporación de San Gil, con su hermano mayor a la cabeza, quien tomó la palabra para dejar unas declaraciones que no dejarán indiferente a nadie tras posar con el presidente, Ángel Haro, que también tuvo palabras de elogio y agradecimiento.
José Antonio Fernández Cabrero aludió a la lógica rivalidad entre Betis y Sevilla FC en esta ciudad haciendo una llamativa comparativa entre la Macarena y el club verdiblanco: "Lo más importante es señalaros qué compartimos. Somos dos corporaciones que son la primera y la tercera de la ciudad. El Betis es la primera corporación de la ciudad, luego hay otra y luego está la hermandad de la Macarena. La hermandad de la Macarena y el Real Betis Balompié suman 554 años de historia. Pero comparten cosas importantísimas. ¿Quién no sabe de la universalidad del Betis? Y quién no sabe que la Macarena tiene 17.000 hermanos y está presente en 117 países del mundo".
"Es un privilegio y una alegría poder estar aquí hoy, en la Macarena, para pedirle por una temporada que sea buena, en la que nos respeten la salud y las lesiones y en la que podamos seguir el buen rumbo de los últimos años. Decía el hermano mayor que compartimos muchas cosas. Es cierto. Compartimos valores. El Betis es mucho más que un club de fútbol. Es una institución que tiene alma. No sólo preocupa el qué, sino el cómo", manifestaba en su discurso el presidente, Ángel Haro.
El consejo de administración del Real Betis Balompié decidió hace ocho años celebrar esta ofrenda floral en diferentes templos de Sevilla y su provincia. La entidad quiere así "agradecer el apoyo y la fidelidad de los béticos de todos los barrios de Sevilla y sus pueblos a través de las hermandades y cofradías, auténticos referentes de la devoción popular andaluza". Desde entonces, este acto se ha realizado en el Cerro del Águila (2015), Santa Genoveva (2016), Esperanza de Triana y Divina Pastora de Triana (2017), Nuestra Señora de Valme de Dos Hermanas (2018), Santa María de la Estrella de Coria del Río (2019), el Señor del Gran Poder en su misión en la parroquia de la Candelaria (2021) y la Virgen de Aguas Santas de Villaverde del Río (2022), con el único paréntesis del año 2020 en que no se pudo celebrar por culpa de la pandemia.
"El Betis es la primera corporación de Sevilla, luego hay otra y después, la hermandad de la Macarena"