La cantera del Real Betis pasa por un excelente momento. El éxito del filial, que pelea en lo más alto en Primera RFEF, es sólo la punta del iceberg. El Juvenil A lidera su grupo en en División de Honor y camina con paso firme en la Youth League, la Champions de la categoría, al tiempo que son bastantes los futbolistas de los escalafones inferiores que reciben las llamadas de sus respectivas selecciones, con una presencia cada vez más notoria de jóvenes talentos internacionales. Obviamente, el fin último es nutrir de jugadores al primer equipo, como viene sucediendo. Pero su director, Miguel Calzado, no esconde al mismo tiempo que "el objetivo es la rentabilidad".
"Nosotros trabajamos para que los jugadores lleguen. Sabemos que no todos pueden hacerlo al primer equipo, pero al menos que lo hagan al fútbol profesional. Es el gran objetivo que se marca cuando un club apuesta por la formación. Al final, la cantera es un departamento más del club, como tal tenemos que producir, tenemos que darle una rentabilidad y esa rentabilidad va a través de eso. No sólo los beneficios, que yo creo que también son positivos a nivel deportivo, como sentido de pertenencia, conocimiento del club... Es evidente que si tú formas un jugador, no tienes ese coste de traspaso. Normalmente, hay diferencias también de salario cuando un chico se trae de fuera, y si encima después eres capaz de venderlo, pues le generas una plusvalía casi del 100% al club", ha explicado en una entrevista en Relevo.
Así, el máximo responsable del fútbol formativo en el club verdiblanco recalca que las ideas están muy claras en este sentido. Sin ir más lejos, el pasado verano pudo comprobarse con los traspasos de Rober González al NEC Nimega o Juan Cruz al Leganés. "Está claro que no vendemos tan a nivel del Real Madrid, porque al final la marca Madrid es bastante poderosa y vende desde cantera directamente. Ha vendido jugadores de millones de euros. Nosotros sólo a Raúl García de Haro, que no llegó a sentarse en el primer equipo. Pero el objetivo es la rentabilidad. Todos no caben en el primer equipo, pero hay que sacarle partido y beneficio económico a toda la inversión que hace el club abajo y a todo el trabajo que se viene realizando. Aquellos que no se asienten o tengan un recorrido más corto en el primer equipo, lo ideal es una salida y un retorno en dinero", destacó.
Para Calzado, uno de los factores clave de este crecimiento ha sido la construcción de la Ciudad Deportiva Rafael Gordillo. "Nos ha permitido dar un salto en captación y formación. Que ahora llevemos tres años consecutivos metiéndonos entre los cuatro mejores de España a nivel de Sub-19 quiere decir que no es una generación. Pasó, vino otra, volvió a dar un alto rendimiento, viene otra y vuelve a mostrar eso. Y sobre todo la continuidad que estamos viendo, de que continuamente hay ese goteo de jugadores en el primer equipo, al nivel del Betis actual, que no era el nivel del Betis de otras épocas. Eso te da un indicativo importante de lo que estamos hablando", señaló.
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Algunos de esos nombres propios son los de Mateo Flores o Jesús Rodríguez, aunque al sevillano no le gusta personalizar, anunciando que es mucho y bueno lo que viene por detrás. "A ver, son los que están más cercanos por edad, pero vienen muchos más de abajo. Ya os lo puedo asegurar que vienen muy buenos jugadores y hay veces que a mí me preguntan bueno, ¿y éste? Sí, pero es que abajo tenemos también otro similar que además está mejor. Y es cierto que después no tenemos ninguna bola de cristal, no sabemos cómo va a progresar cada uno, aunque tengan unas condiciones de base, después tienen que demostrarlas", advirtió.
Otro de los futbolistas en quien había muchas esperanzas depositadas es Félix Garreta, que ya ha tiene el ata médica tras el susto vivido a comienzos del pasado mes de mayo, cuando estuvo varios días en coma inducido en la UCI tras sufrir un accidente doméstico. Pese a todo, la prudencia es máxima con el central, que el pasado curso estuvo cedido en el Amorebieta en Segunda división. "Ha sido algo duro. Primero, por cómo fue todo, nos impactó mucho. Es un chico que estaba jugando y de la noche a la mañana tiene que dejar de jugar, está ingresado. Ahora mismo, que ya podamos verlo, que podamos verlo por aquí, para nosotros ya es una alegría enorme. Serán los servicios médicos los que irán marcando los pasos porque no ha tenido una lesión leve, sino que ha sido algo importante como para arriesgar, como para apresurarnos de cara al futuro", aseguró.