Alejandro Sáez5 min lecturaLarga cumbre en las oficinas del Camp Nou, donde Laporta y los suyos han estado más de cuatro horas reunidos tratando de darle forma a la solución del ‘Caso Olmo’. Tanto Dani Olmo como Pau Víctor ya no están inscritos en LaLiga, aunque en la entidad azulgrana confían que este viernes 3 de enero quede todo resuelto.
En el FC Barcelona esperan haber recibido mañana todas las confirmaciones oficiales de pago por parte de la venta de los asientos VIP del futuro Spotify Camp Nou, una vez que desde el club se entienda que el proyecto económico entró en plazo y que sólo fueron cuestiones burocráticas ajenas al Barça las que impidieron que la Comisión Delegada tuviera todos los elementos para poder ratificar la licencia federativa de Olmo y Pau Víctor.
Sin embargo, no se antoja tan sencillo, pues la postura de LaLiga y la RFEF parece bastante seria. “Hay que respetar a todos los clubes, y las reglas”, ha dicho Ancelotti en rueda de prensa al ser cuestionado sobre ello. Y eso, precisamente, es lo que temen en LaLiga, pues crearían un precedente peligroso si, finalmente, dejan que Laporta la cuele con una de sus nuevas palancas. El trato de favor sería evidente.
Los precedentes, además, no son nada halagüeños, jugando todos en contra de Dani Olmo y Pau Víctor. En 2014 ocurrió algo muy parecido con Pedro León y el Getafe, que superaba el límite salarial impuesto por LaLiga, de 17 millones de euros en ese momento. Tebas, por tanto, impidió la inscripción de Pedro León, quien un año antes había firmado a cambio de seis millones de euros tras haber militado en préstamo por el Real Madrid.
Pedro León había tenido ofertas para salir ese verano, por lo que su ficha fue la última que se tramitó por parte del Getafe, habiendo sido inscritos ya el resto de componentes de la plantilla. El futbolista acabó denunciando al club y la AFE a LaLiga. La RFEF de Luis Rubiales, enfrentada a la patronal, expidió la licencia del futbolista -con Olmo no ha sido así-, pero LaLiga amenazó con que el Getafe incurriría en alineación indebida si jugaba finalmente Pedro León. La Justicia ordinaria le acabó dando la cautelar al futbolista -todo lo contrario que a Dani Olmo-, pero estuvo seis meses sin poder jugar.
Dos años después, tras un largo proceso judicial a raíz del recurso de LaLiga, el Tribunal Superior de Justicia dio la razón a Tebas, desestimando el recurso del futbolista y la AFE. Un año más tarde, el Mercantil número 8 de Madrid volvió a desestimar un nuevo recurso al jugador, lo que ahora a Olmo le resta cualquier esperanza.
Otro caso similar al de Dani Olmo fue el de Kike García en 2016, cuando fichó por el Eibar en enero. El Middlesbrough mandó tarde la documentación, llegando un minuto después de que cerrara el mercado. LaLiga fue inflexible y no lo aceptó, pese a que Kike García había firmado ya un contrato por tres temporadas. No le quedó otra al futbolista, que ya había abandonado el conjunto inglés, de incorporarse al Eibar y entrenarse con el conjunto embarres hasta el 30 de junio, ya que no le permitieron jugar con su nuevo club hasta el 1 de julio.
En 2019 fue el Málaga CF el que protagonizó un incidente parecido. Los costasoleños ficharon a Shinju Okazaki procedente del Leicester y tras toda una pretemporada en La Rosaleda llegó el último día de mercado sin espacio salarial para poder inscribirlo. No coló en LaLiga la bajada de sueldo que el Málaga CF presentó a última hora para tratar inscribirlo y el japonés acabó rescindiendo y fichando por el Huesca. José Rodríguez, Mula e Iván Rodríguez corrieron una suerte distinta y tuvieron que esperar medio año para poder jugar con el Málaga CF, siendo inscritos en enero.
Los precedentes, visto lo visto, son los que son. Con LaLiga y la RFEF inflexible por el momento, unido a la presión social por parte del resto de clubes y de figuras relevantes dentro del fútbol nacional, Joan Laporta parece conocer ya la respuesta sobre el 'Caso Dani Olmo': No.