La dirección del Fútbol Club Barcelona tiene que empezar a tomar decisiones importantes una vez finalizada la temporada. Con Xavi Hernández fuera y la llegada de Hansi Flick, la planificación deportiva de Deco puede variar en función de los perfiles que más gusten al nuevo técnico aunque no en el caso del polivalente Joshua Kimmich. Tanto para Xavi como para Flick, con el que coincidió en el Bayern de Múnich y en la selección alemana, era una prioridad su fichaje. Y decimos era porque todo apunta a que no se va a poder hacer... salvo giro radical de la situación.
Es cierto que el Barcelona lleva tiempo trabajando en la vía del lateral derecho y pivote del Bayern Múnich, cuyo fichaje ya se intentó el pasado verano, habiendo dado el alemán el sí a Xavi, aunque las diferencias económicas y la apretada situación financiera del club catalán no permitió que llegara a buen puerto. Y algo similar sucede ahora.
Al futbolista tan sólo le queda un año de contrato con los bávaros, por lo que podría salir a un precio inferior en caso de no renovar su vincular, sin embargo, tal y como recoge Sport, las negociaciones entre el club azulgrana y los representantes del jugador están estancadas debido a las importantes diferencias económicas ente la oferta presentada por Deco y las exigencias de Kimmich.
Según apuntan desde Alemania, Joshua Kimmich percibe en el Bayern Múnich un salario de unos 19,5 millones de euros brutos, una cifra difícilmente alcanzable por el club blaugrana sobre todo porque todavía está a la espera de poder regresar a la regla del 1:1 para poder fichar con más libertad por parte de LaLiga.
Además, la intención del club azulgrana es intentar mantener equilibrio en los salarios después del despilfarro en altos contratos en la última década. A todo ello se le suma que la próxima temporada la ficha de Robert Lewandowski se eleva hasta los casi 20 millones de euros, por lo que mucho tiene que cambiar la situación para que Kimmich pueda ser una opción real este verano.
Una de las posibles vías es la de hacer una gran venta con la que hacer espacio salarial y de paso ingresar dinero para afrontar su fichaje este verano, o bien apostar a que Kimmich no acabará renovando con el Bayern Múnich para así poder atarlo a partir del próximo 1 de enero de 2025 como agente libre.