Andrea Berta, director deportivo desde hace una década del Atlético de Madrid, pondrá fin, si nada lo remedia, a su etapa en el Metropolitano. El italiano quien, en los últimos años, ha sido una pieza clave para Simeone o Gil Marín, tendría claro que no pintaría demasiado en los planes de futuro de la entidad, que quiere seguir creciendo en todas las competiciones. Además, la llegada de Carlos Bucero, quien ha ido acumulando cada vez más poder con el paso de los meses, tampoco ha ayudado a que quien fuera uno de los hombres fuertes de la institución continúe a corto plazo en la institución de la capital de España.
En primer lugar, tal y como revela Marca, el adiós del todavía director deportivo del Atlético podría haber comenzado el 20 de enero. No en vano, esta fue la fecha en la que aterrizaron en el club dos hombres que han sido grandes apuestas de la entidad. Este es el caso de Óscar Mayo y Carlos Bucero. Hay que poner el foco en el segundo, ya que firmó como director general de fútbol, un cargo que incluye toda la parcela deportiva… incluyendo el área que encabeza un Berta que ha ido perdiendo influencia en los últimos meses por este motivo.
Precisamente, que se incluyera un cargo intermedio y que Berta no pudiera hablar directamente con el consejero delegado, Miguel Ángel Gil Marín, causó el enfado del director deportivo, quien estuvo cerca de vivir la llegada de Mateu Alemany en su momento. Estos cambios en el organigrama del Atlético han enfado al ejecutivo, hasta el punto de que tiene claro ya que su etapa en la capital está llegando a su fin, terminando con un escenario que no estaba siendo nada cómodo para ninguna de las dos partes.
El director deportivo, que no quiere ser una figura decorativa en la entidad, está manteniendo su actividad en el día a día de un Atlético de Madrid que quiere mantener la buena racha que está viviendo en las últimas semanas. Berta sigue haciendo acto de presencia en las sesiones de entrenamiento y sigue viajando a gran parte de los encuentros que disputan los rojiblancos lejos de su estadio, el Metropolitano.
Por otro lado, hay que tener en cuenta que el futuro del entrenador, Diego Pablo Simeone, no depende en ningún aspecto de la continuidad de Andrea Berta, con quien ha formado, en los últimos años, una particular sociedad. A pesar de que Relevo apuntó en los últimos días que el Atlético de Madrid ya manejaba una lista con sus posibles sustitutos, lo que parece es que nada hace indicar que el argentino vaya a marcharse a corto plazo de la entidad que disputa sus encuentros en el Metropolitano.
Simeone, que ha dejado la pelota en el tejado del club a la hora de responder acerca de su futuro, cuenta con contrato hasta 2027. Esto hace que su permanencia en el Atlético de Madrid parezca muy probable. Por lo tanto, la tranquilidad debe ser la reinante en la afición colchonera, que sufrió un pequeño sobresalto en los últimos días acerca de un punto clave acerca de una de sus grandes referencias, tanto dentro como fuera del terreno de juego.