A medida que el 2023 llega a su fin, la Agencia Tributaria está dando los primeros pasos para la próxima Campaña de la Renta 2024. Este proceso, que involucra a diversos contribuyentes, desde trabajadores asalariados hasta autónomos y pensionistas con ingresos específicos, es un tema que suscita interés y preocupación.
Dentro del plan de recuperación presentado por el Gobierno de Pedro Sánchez en Bruselas, se vislumbran evaluaciones de los beneficios fiscales en el IRPF. Este indicio apunta a posibles modificaciones en las deducciones fiscales, generando expectativas y cuestionamientos entre los contribuyentes.
Una de las medidas que se mantendrá para el próximo año es el aumento de la cuantía de la reducción por rendimiento de trabajo. Esta ayuda, implementada por primera vez en la última campaña tributaria, está destinada a aquellos que obtienen rendimientos de trabajo y cumplen con requisitos específicos, como no tener ingresos distintos al trabajo que superen los 6.500 euros.
La obligación de presentar la declaración de la Renta seguirá aplicándose a aquellos cuyos ingresos superen los 22.000 euros en el ejercicio económico 2023. Además, se ajustará el límite para quienes tengan más de un pagador, elevándose de 14.000 a 15.000 euros, siempre y cuando los ingresos superen los 1.500 euros.
Otro cambio significativo afecta a la reducción de la base imponible de los planes de pensiones. Se experimentará un aumento del límite absoluto de las aportaciones, pasando de 1.500 a 8.500 euros. Esta modificación se acompaña de nuevas deducciones tanto para empresas como para trabajadores en los recién implementados planes de pensiones de empleo.
Por último, es importante destacar la deducción por maternidad. Esta permite a las mujeres con hijos menores de 3 años, con derecho a la aplicación del mínimo por descendientes, reducir la cuota diferencial hasta en 1.200 euros anuales por cada hijo que cumpla con los requisitos establecidos, según lo estipulado en la reciente Ley de Familia.
Entre las posibles modificaciones se encuentra la deducción por tributación conjunta, que beneficia principalmente a matrimonios en los que uno de los cónyuges trabaja y el otro no, así como a unidades monoparentales con hijos. La posible revisión de esta deducción se vincula al potencial ahorro fiscal que podría generarse.
En España, alrededor de 3,2 millones de contribuyentes presentaron su declaración conjunta en el último año, generando un costo adicional de 2.400 millones de euros, según las estimaciones de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AiReF), basándose en datos de la Memoria de Beneficios Fiscales.
A medida que nos aproximamos a la Campaña de la Renta 2024, los contribuyentes deben estar atentos a estos cambios y ajustes, preparándose para cumplir con sus obligaciones fiscales de manera informada y eficiente.