Iker Castaño4 min lecturaMuchos ciudadanos vinculan la estación otoñal directamente con la rutina y la vuelta al trabajo tras las vacaciones de verano, sin embargo hay quienes la encaran con otra cara, pudiendo hacer tanto la labor profesional como preparar lo que será la temporada otoñal. Llegan las escapadas de los fines de semana y puentes de otoño y hay un sinfín de atractivos para disfrutar en una tierra tan completa como la de Andalucía.
Si unimos los diferentes ingredientes (buen tiempo, patrimonio o gastronomía) nos sale un plato perfecto para poder degustarlo. Por tanto, conviene coger la libreta y apuntar cuáles son aquellos planes perfectos para hacer en la comunidad. Te proponemos cinco destinos por el interior de Andalucía, una joya por descubrir para muchos, donde se combinan pasado, presente y futuro, tradiciones milenarias y una oferta gastronómica sin igual.
En primer lugar viajamos hasta Jaén, donde se encuentran dos localidades jienenses como Úbeda y Baeza que son sinónimo de historia pura del patrimonio andaluz, reconocida como Patrimonio Mundial de la Humanidad. Se les ha llegado a comparar con ciudades italianas porque tienen un espléndido conjunto monumental compuesto a base de palacios e iglesias renacentistas del siglo XVI y XVII.
Apunten. En la ruta por Úbeda no debes perderte las visitas a la Capilla del Salvador, el Oratorio de San Juan de la Cruz o la Iglesia de Santa María de los Reales Alcázares. Además, por Baeza tienes que visitar la Plaza del Pópulo, la Catedral, el Palacio de Jabalquinto o el Palacio de los Majorada.
Sin salirnos de la provincia de Jaén, ahora nos vamos a la Sierra de Cazorla, donde las rutas de senderismo son uno de sus grandes atractivos, además de sus pueblos, desde Cazorla a Segura de la Sierra, donde no puede faltar la visita al imponente castillo. Otros planes imprescindibles en la zona es la visita al nacimiento del río Guadalquivir o el paseo por la historia del castillo templario de la Yedra.
La segunda opción que recomendamos al viajero es acudir a la Sierra de Grazalema, corazón de Andalucía, elevado frente a las aguas del Mediterráneo, a modo de gigantesca muralla salpicada de pequeños pueblos blancos. Hay rutas excursionistas en todas las direcciones y también se pueden realizar actividades de aventura como kayak, barranquismo o parapente.
Como cuarta opción, y no deja de ser menos interesantes que las otras tres, estaría la visita a Ronda, con la visita al famoso Puente Nuevo sobre el río Tajo que se ha convertido en seña de identidad de la geografía andaluza y sin duda monumento más emblemático de Ronda. Construido entre 1751 y 1793, su altura de 98 metros lo encumbró como uno de los puentes más altos del mundo hasta 1839.
No podemos dejar de visitar en otoño el embrujo de la Alpujarra, con casas blancas encajadas en la sierra entre calles estrellas y sinuosas, de cuestas casi imposibles. Es un vivo ejemplo de la riqueza rural y natural de Andalucía