Sandra Romero4 min lecturaMetidos ya de lleno en otoño, las temperaturas parece que cada vez acompañan más a la estación en la que nos encontramos, habiendo dejado atrás el conocido pupularmente como 'veroño', con altas temperaturas y un tiempo poco habitual a las fechas en las que nos encontramos. Si algo tiene el otoño es el sinfín de oportunidades que le brinda la estación a los amantes del senderismo. Las temperaturas bajan y la naturalez toma una tonalidad que invita a perderse por sus paisajes y explorar las rutas de senderismo que nos ofrece Andalucía y sus diferentes provincias.
Uno de los rincones más especiales que nos ofrece Andalucía en estas fechas es el Bosque de Cobre, un rincón muy especial que permite al senderista apreciar la belleza de la naturaleza. Situado entre la Serranía de Ronda y la Sierra de las Nieves, en la provincia de Málaga, el Bosque de Cobre es un lugar con un encanto único bañado de tonos amarillos, rojos y naranjas. Un verdadero espectáculo de la naturaleza que cada año atrae a miles de senderistas y curiosos que disfrutan de de él.
La respuesta es muy sencilla y tiene su respuesta en la tonalidad de sus paisajes. Cuando te adentras en este paisaje, te sumerges en tonalidades que imitan al cobre. Esto se debe principalmente a las hojas de los castaños, que durante el otoño cambian su coloración desde el verde hasta el rojo y finalmente al marrón.
Varios son los municipios que configuran el Bosque de Cobre: Alpandeire, Benalauría, Cartajima, Faraján, Genalguacil, Igualeja, Jubrique, Júzcar, Parauta, Pujerra y Yunquera. Su ecosistema ofrece una variada gama de paisajes, gracias a su complicada orografía. Los suelos y los valles fluviales garantizan la humedad necesaria para la existencia de densos bosques de alcornoques, encinas, pinos y castaños.
El Bosque de Cobre es, por tanto, un entorno privilegiado en las sierras de Málaga que ofrece una estampa espectacular. En él se pueden observar diversas especies de árboles, destacando una extensa castañeda que tiñe el bosque de tonos marrones. Lógicamente, es también un lugar ideal para la práctica de actividades al aire libre, como es el caso del senderismo.
Las rutas de senderismo del Bosque de Cobre comparten un denominador común además de sus colores ocres. Se trata del agua. La Serranía de Ronda experimenta un resurgimiento de sus ríos, arroyos y manantiales con la llegada del otoño. Durante su recorrido, los visitantes pueden disfrutar de hermosos paisajes protagonizados por estos elementos hidrológicos.
Desde la Sierra de las Nieves descienden numerosos arroyos que mueren en los tres ríos principales de la comarca: el Guadalteba, el Guadiaro y el Genal. Un lugar de mucha belleza para visitar en esta época es el nacimiento del Benaoján, uno de los afluentes del río Guadiaro. Al otro lado de la cuenca se encuentra el nacimiento del río Genal, en el municipio de Igualeja.
Pero no sólo de senderismo vive el Bosque de Cobre. En las altas crestas calizas y desprovistas de vegetación que separan las aguas del Genal y del Guadiaro, es posible practicar también la escalada y el ascenso por vías ferratas, una experiencia que no debes perderte si eres amante de la aventura.