Sara Portillo Maya4 min lecturaMayo es un buen momento para realizar una escapada y la revista especializada Viajes National Geographic lo tiene claro, hay un pueblo que sobresale sobre los demás. Lo ha catalogado como el más bonito para visitar durante el mes de mayo en España y está en el sur, en Andalucía.
Concretamente, queda ubicado en Córdoba, en la Comarca Subbética. Se trata, nada más y nada menos, que de Iznájar. Un pequeño municipio que apenas llega a los 4.000 habitantes pero que presenta un interés turístico enorme debido a su pasado, su gastronomía, su patrimonio… Sin duda, un lugar que todo turista debería conocer al menos una vez en la vida. Y si esa vez en la vida es en mayo gozará del pueblo más bonito de España en esa época.
Una de las cosas más destacables de Iznájar es su embalse, uno que no parece haber sido creado de forma artificial y se percibe como parte de la naturaleza. Hasta bien entrados los años 60 del siglo pasado no hubo agua en este municipio. Fue en 1966 cuando se comenzó a embalsar agua y hoy en día forma parte del paisaje, además de ser el mayor lago de la comunidad andaluza. Así describe la mencionada revista el pueblo que se ha colgado la medalla de ser el más bonito de España para visitar en el quinto mes del año: “Un capricho rural que durante este mes se vuelca en demostrarlo entre sus balcones y embalse”.
Quien quiera deleitarse visitando este precioso municipio cordobés, puede además visitar otros grandes atractivos turísticos, como el Mirador de la Villa. A través del mencionado mirador, se pueden observar la Sierra de las Ventanas y el formidable arroyo de Priego. Además, en épocas de sequía es posible vislumbrar el Puente del Molinillo y la antigua carretera, al no estar el embalse completamente lleno. También se puede hacer un recorrido al pasado visitando su castillo (de cuyo nombre tiene origen Iznájar, que viene de ‘hisn’, castillo, y ‘al-ashar’, alegre). Se trata de un monumento icónico que data del siglo VIII, de origen árabe.
El Patio de las Comedias, sus aldeas, etcétera, son otros de los grandes atractivos de Iznájar. Y, por si fuera poco, su gastronomía le hace ganar muchos puntos. Ir a la localidad cordobesa y no disfrutar de su famoso salmorejo -con un toque muy original-, debe ser una especie de pecado. El secreto está en el toque que le ofrece el sabor de la naranja y el bacalao. Hay un lugar único, además, el Mesón de la abuela María, donde gozar del salmorejo clásico y de otras versiones del mismo. Además, para los más dulceros los postres, donde hay uno que es clásico y completamente casero: los ‘huevos volaos’ (se realizan con huevos, leche, mostachones y canela). Visitar a este municipio, que es uno de los más bonitos de Córdoba en cualquier época del año, tiene un plus en primavera: el Festival de los Balcones y Rincones, un evento que lleva más de una década en funcionamiento (12 años). También se encuentra el Mayo Festivo, una fiesta en la que se reparten vasitos de su famoso salmorejo y de los flamenquines, también elementos muy típicos de su gastronomía.