La situación por la que atraviesa Jesé Rodríguez, sin equipo desde que dejó el Coritiba de Brasil, no pasa inadvertida en Gran Canaria, donde comprueban que uno de sus deportistas más reconocidos hace tiempo que se convirtió en un auténtico juguete roto del fútbol.
Tres son ya los mercados en los que Jesé Rodríguez se ha quedado en blanco, ofreciéndose y recibiendo negativas a la hora de encontrar un nuevo reto como profesional. El último de ellos, un Eldense de Segunda división al que el delantero se ofreció y donde desestimaron su propuesta a no ser el Jesé que era. Su mala cabeza, una importante lesión y una vida azarosa marcada por la televisión y por una relación con Aurah Ruiz que, para muchos, es otra de las principales razones de su fracaso, son algunas de las principales causas de que la carrera del futbolista haya ido en declive con el paso de los años.
Tras despuntar en la cantera del Real Madrid y no conseguir asentarse en el primer equipo blanco, con 23 años partió al PSG a cambio de un suculento contrato de cinco millones de euros por temporada. El principio del fin; tras ello: Stoke City, Sporting de Lisboa, Las Palmas, Betis, Ankarugucu, Sampdoria y Coritiba, hasta encontrarse actualmente sin equipo.
En la isla, lógicamente, se habla de ello, por eso en una entrevista en La Provincia han preguntado por Jesé Rodríguez al psicólogo Aarón Sosa Santana, quien trata a las jugadoras del Gran Canaria Teldeportivo de Fútbol Sala y da clases en la Escuela de Entrenadores. Un psicólogo deportivo que trata con deportistas de distinta índole y que pasó por los filiales de la UD Las Palmas, por lo que conoce todo lo que se sufre en el fútbol de primera mano.
"El grueso de deportistas acuden para aprender a gestionarse emocionalmente. Quieren y carecen de los recursos. El deportista percibe una amenaza y luego llega la ansiedad como mecanismo de respuesta", explica Aarón Sosa, quien asegura que algunos deportistas "vienen sobrecargados y se sienten vulnerables". Eso "les afecta", pues "sienten un estrés".
Sobre el auge de la psicología deportiva, el especialista resalta que "sí hay una mayor conciencia social en la búsqueda de un psicólogo deportivo", quien también comenta los peligros de las redes sociales.
"Hay personas que se han visto atrapadas, e incluso, tras proceder con buenos hábitos, por la sobreexposición. No puedes controlar lo que circula por las redes", asegura el psicólogo, quien tiene claro que "si el futbolista no está bien armado mentalmente, puede ser preso". "La atención es un puntero láser, si el deportista tiene la atención puesta al 100 % en lo que no depende de él, es más fácil ser vulnerable a las críticas", añade.
Al ser cuestionado directamente por la situación de Jesé, Aarón Sosa aclara que no lo conoce personalmente y que por tanto tampoco puede emitir un juicio. Eso sí, tiene claro que "nadie mejor que él para conocer su situación y objetivos", así "como para saber la forma para explotar sus recursos y hacer lo que quiera".