Fernando Mateos3 min lecturaTras ser condenado a cuatro años y medio de cárcel por violar a una joven en el baño de un reservado de la discoteca Sutton de Barcelona en diciembre de 2022, forzando la voluntad de la víctima "con uso de la violencia", Dani Alves ha conseguido que la Audiencia de Barcelona decrete su libertad provisional.
Después de pasar 14 meses en prisión, tiempo que le computará en la pena que debe cumplir si no prosperan los recursos de su defensa, el ex futbolista del FC Barcelona quedará en libertad previo pago de un millón de euros de fianza, si bien no podrá salir de España, para lo cual le serán retirados sus dos pasaportes, el español y el brasileño.
Pero, de momento, el brasileño no logró reunir este pasado miércoles la cantidad fijada para poder abandonar la cárcel, por lo que tuvo que pasar en ella al menos una noche más. Y es que, tras su detención, sus cuentas bancarias quedaron inmovilizadas, a lo que se une que todo su capital en Brasil se encuentra embargado por el proceso judicial que mantiene con su ex mujer por la pensión de sus dos hijos.
Ya durante el juicio, su abogada, Inés Guardiola, aludió a la “ahogada situación económica" de su representado, que perdió los contratos de patrocinio y con su club, el Puebla mexicano, al estallar el caso, indicando que su “"saldo bancario" era de 70.000 euros.
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Por todo ello, Alves ha tenido que pedir ayuda para poder pagar la fianza. Ya lo hizo, de hecho, para abonar los 150.000 euros con los que tuvo que indemnizar a la víctima, que le fueron prestados por el padre de su compatriota y ex compañero Neymar, que de nuevo podría ser quien desembolse el millón de euros que cuesta su libertad, según anunció La Vanguardia.
De este modo, se espera que a lo largo de este jueves se produzca el pago de la fianza y la puesta en libertad del ex futbolista, que deberá presentarse cada semana en un juzgado para firmar y certificar así que no se ha fugado del país.
En cualquier caso, Alves también tiene otra vía para pagar el millón de euros que le exigen para poder abandonar la prisión. En concreto, se trata de una devolución pendiente de algo mas de nueve millones de euros por parte de la Agencia Tributaria, a la que le ha ganado cuatro sentencias, si bien este dinero podría tardar algunos días aún en llegar a sus cuentas.
