El 2024 no ha podido arrancar peor para José Mourinho. Tras haber sido destituido de la Roma el pasado mes de enero, ahora el técnico portugués ha recibido otra notificación desagradable. El Tribunal Supremo ha confirmado que el entrenador luso debe pagar una deuda correspondiente a la liquidación tributaria relativa al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) del 2011 y 2012, cuando dirigía el Real Madrid.
En 2018, el Tribunal Económico Administrativo Central desestimó su reclamación relativa al IRPF de los períodos 2010-2012, que se tradujo en una multa tributaria de 571.073 euros y un acuerdo de liquidación de 881.368 euros. Sin embargo, la Audiencia Nacional anuló después la sanción y declaró prescrito el derecho de la Administración a determinar la deuda tributaria correspondiente al 2010, pero sí mantuvo los años 2011 y 2012.
De esta forma, Mourinho recurrió las liquidaciones de estos dos años porque alegó la incorrecta valoración del tribunal económico sobre la tributación relativa a los pagos recibidos por la mediación de su contrato con el Real Madrid. En concreto, alegaba que esos pagos no podían considerarse retribuciones suyas porque no se acreditó que el club pagara a la sociedad Gestifute -dedicada a la intermediación entre deportistas y clubes de fútbol- por cuenta suya, sino que fue el Real Madrid quien requirió los servicios de esta empresa y le pagó por ello.
Pero, ahora, la Sala de lo Contencioso Administrativo del Supremo ha rechazado su recurso y le obliga a completar las liquidaciones de 2011 y 2012 al recordar que ni se produjo retención, ni fue declarado rendimiento sujeto por parte de entrenador en esos pagos, por lo que no la incluyó en su declaración de IRPF.
Por último, en la sentencia destaca que "no cabe reprochar a la Administración Tributaria" infracción alguna en esos años, puesto "que ninguna falta de diligencia trasluce el presente caso, máxime, teniendo en consideración que no fue hasta la correspondiente calificación jurídica, efectuada por la inspección, respecto de las cantidades abonadas sobre las que no se practicó retención, cuando se constató la obligación de retener dichas cantidades por el pagador".
Mourinho no entiende de años sabáticos y ya está dando los primeros pasos de cara al que podría ser su próximo reto en los banquillos. Así, al menos, ha informado el tabloide alemán Bild, que asegura que está aprendiendo alemán por si surge en los próximos meses la posibilidad de entrenar en la Bundesliga. Desde que salió de Italia son muchos los rumores sobre su futuro, aunque esta noticia más allá y asegura que el aprender dicho idioma está encaminado a la posibilidad de entrenar al Bayern Múnich en un futuro no muy lejano.