El regreso de Dani Alves puede ser realidad antes de lo esperado

Es el futbolista más laureado de la historia. Y sigue a pleno rendimiento. A sus 38 años, no se le pasa por la cabeza retirarse. Habitual todavía en la selección brasileña y recientemente proclamado oro olímpico en Tokyo 2020, Dani Alves sueña con volver a Europa, a LaLiga más concretamente, donde no le faltarían pretendientes. España está demostrando en los últimos años que, lejos de ser un retiro dorado para veteranos, otorga una segunda juventud a cuarentones o casi como Joaquín, Bravo, Soldado, Jorge Molina y otros muchos. El próximo podría ser el brasileño, historia del Sevilla FC y el FC Barcelona, con problemas en el Sao Paulo.

Lateral derecho y mediocentro, el de Juazeiro siempre fue un generador nato de acciones ofensivas desde cualquier parte del campo. Hernán Crespo se frotaba las manos con él esta temporada, si bien la chispa ha saltado por una deuda que han contraído en Morumbí con Alves, que se negó a volver a los entrenamientos este viernes y, hasta nueva orden, seguirá sin comparecer con la tricolor. La entidad paulista admite que dejó de pagar al zaguero un montante que, según la prensa local, superaría los dos millones de dólares, lo que precipitará, dicen todas las fuentes allí, la marcha del ex nervionense antes de que expire su contrato el 31 de diciembre de 2022. Así, la gran mayoría presupone una libertad para el próximo mercado invernal de 2021 en Europa, con lo que se convertiría en una 'ganga' para muchos.

Aunque las partes bromearon en varias ocasiones con su reencuentro y Dani sigue en la elite, a gran nivel y con un amor confeso por los colores blanco y rojo, no tiene sitio a priori con Lopetegui, puesto que Jesús Navas acaba de renovar por tres temporadas y se le ha fichado competencia (Gonzalo Montiel). Mucho menos factible todavía sería el retorno a un Barça sin lateral derecho de enjundia, tras el traspaso al Tottenham de Emerson y el discreto rendimiento de Dest. Sin embargo, la vuelta a la presidencia de Laporta, presidente que regía el club cuando Alves se marchó a la Juventus en 2006 y contra el que despotricó en la prensa, le cierra las puertas del todo. Eso sí, opciones no le faltarían en LaLiga si se pone a tiro en unos meses.