Ningún deportista en activo ha participado en más Juegos Paralímpicos que José Manuel Ruiz Reyes. El deportista granadino, que comenzó su andadura en los Juegos de Atlanta en 1996, encadenó ocho participaciones consecutivos. Conocedor como pocos de los esfuerzos necesarios para lograrlo, llama la atención la postura que mantiene acerca de la accesibilidad de los deportistas paralímpicos para los Juegos. Lo hace en una entrevista distendida con ESTADIO Deportivo, donde relata sus orígenes, su capacidad para compaginar la vida de deportista de alto rendimiento y docente e, incluso, cómo postuló para portero del Real Madrid.
Los comienzos fueron complicados: "Desde Atlanta 96 hasta Pekín 2008, no existía el plan ADOP como existe hoy en día. Es decir, había una norma a nivel nacional en la que en función de los resultados que se conseguían en campeonatos del mundo o Juegos Paralímpicos, pues tú sabes que obtienes un resultado y te corresponde una beca económica y aparte un premio económico como existe hoy en día. Anteriormente a Pekín, es decir, mis participaciones en Atenas, en Sydney o en Atlanta, pues todas esas medallas no recibí ningún premio económico ni ninguna beca. No había nada legislado, ninguna normativa y bueno solamente si tu ayuntamiento, o tu junta autonómica, quería digamos gratificarte de alguna forma, pues lo hacía".
Una evolución patente la que se dio en este aspecto: "En eso hemos evolucionado mucho y tanto como que ya sabéis que en París 2024 los premios económicos por medalla, tanto los deportistas olímpicos como paralímpicos españoles los compañeros han recibido la misma cuantía económica. En apenas 16 años, hemos pasado de prácticamente nada a prácticamente todo. Es decir, a la misma, a la igualdad de premio económico, no de beca porque la beca al final también, el comité olímpico y el comité paralímpico, pues tienen diferentes criterios, pero a nivel de lo que sea el premio económico por medalla, sí es exactamente igual para un deportista olímpico y paralímpico en España".
Llega aquí la reflexión a contracorriente del deportista: "Ojalá que sigamos en esta senda, aunque bueno, yo también soy en ese sentido un poco, no es que diga que no comparta ese criterio... Pero voy a ponerte un ejemplo, porque en tenis de mesa, por ejemplo, a nivel paralímpico hay 10 categorías u 11 categorías. Y entonces, ¿cuántas medallas hay en juego por cada categoría? Pues hay tres medallas por cada categoría en la que estamos, divididas en función de la discapacidad que tenemos cada deportista. Sin embargo, en tenis de mesa masculino, a nivel mundial, absoluto olímpico, hay solamente tres medallas en juego para todos los deportistas".
En este sentido, José Manuel se mostró crítico: "Nosotros tenemos más opciones porque hay menos deportistas en nuestras distintas discapacidades y hay más medallas en juego. Entonces bueno, por eso digo que dentro de la igualdad, yo no digo que no sea justo o menos justo, pero si es verdad que bueno, el deportista olímpico lo tiene más complicado que nosotros en este sentido".