Desde este mismo lunes,
Joan Plaza ha dejado de ser entrenador del Real Betis de Baloncesto. Según ha explicado el club, la rescisión del contrato ha sido negociada "a petición del propio técnico" y ambas partes han alcanzado un acuerdo para separar sus caminos.
"El Real Betis y Joan Plaza han llegado a un acuerdo,
a petición del propio entrenador, para la desvinculación del catalán con la entidad verdiblanca.
El club le agradece todo su trabajo y compromiso, al mismo tiempo que le desea suerte en sus próximos retos profesionales", ha anunciado la entidad verdiblanca en un comunicado en redes sociales.
Plaza ya había insinuado que la derrota ante el
Real Madrid podría haber sido su último encuentro como verdiblanco. Sin embargo, cuando fue preguntado de manera más concreta por si se marcharía, se mostró
resignado y no confirmó nada, remitiendo las cuestiones a los rectores de la entidad.
"Creer en mí no es una cuestión de fe, sino de hechos. Yo pido al club lo que creo que tengo que pedir, porque si hemos de competir contra Fuenlabrada, Obradoiro y demás equipos de la zona baja debemos estar muy centrados.
Llevo un año intentando ayudar al equipo y provocar la mejoría del club. Siempre, en todos los equipos, me peleo por mejorar los vestuarios, las máquinas del gimnasio y por eso he dicho que necesito que todos vayamos de la mano", siguió el ya exbético.
"
Hay gente que es menos insistente que yo con estas cosas, pero a mí me parieron así. Y en esta, como en todas las empresas, si no se está de acuerdo con ciertas cosas hay que dar un paso al lado", finalizó Joan Plaza la que fue su última rueda de prensa como entrenador del Real Betis, en un tono bastante crítico y que hace entender que las
discrepancias con la entidad vienen de lejos.