No firmó una buena temporada
19/20. Vamos, como el resto de la plantilla, con honrosas y puntuales
excepciones. La
irregularidad en el rendimiento persiguió a
Marc Bartra a lo largo del año, siendo, sin duda, en parte responsable de los
60 goles que encajó el Betis, un verdadero
lastre para cualquier aspiración ambiciosa. Con todo, el catalán ha
cambiado el chip durante sus vacaciones y demostrado su
compromiso con el equipo, que afronta este jueves su tercer día en
Marbella, donde arribaron el martes por la tarde, para celebrar el primer 'stage' de
pretemporada a las órdenes de
Manuel Pellegrini.
"Empiezo mi
cuarta temporada contigo, y en estos años he aprendido junto a mis compañeros que representarte dentro del terreno de juego es algo
especial; no eres uno más, eres distinto, tienes ese algo que cuando las cosas van bien es capaz de
enamorarte con todo lo que te rodea y de hacerte sentir el jugador más
feliz del mundo. Pero, cuando no van tan bien, llegas a casa muy
jodido y con unas ganas inmensas de volver a jugar el siguiente partido para
ganar e intentar que todo cambie, porque sabes que, aparte de nuestra gente, también estás
defraudando a miles de personas que te sienten parte de su vida y que el Betis es lo que más quieren", escribía el central en su perfil de Instagram, donde siguió desarrollando esta especie de
carta de amor al club.
"Es por eso que hoy te vuelvo a recibir con la misma
sonrisa que tenía el primer día cuando llegué de
Alemania, ésa con la que intento disfrutar cada día junto a mis compañeros, cada uno a su manera, pero te aseguro de verdad que estamos con muchas ganas de volver a ganar y de que los béticos se sientan aún más
orgullosos de formar parte de ti. Con todo mi cariño, Marc", terminaba Bartra, deseoso de
reivindicarse y de pasar página para que todo el beticismo vuelva a recuperar la
ilusión de años anteriores.